Superequipos y superfracasos: los grandes nombres de la NBA que dejaron marca
Brooklyn Nets, 76ers y unos Lakers sin lesiones son ejemplos de un “Big Three” o tridente exitoso en un equipo de básquetbol. ¿Grandes figuras son sinónimo de éxito siempre?
En medio del mercado de pases de la NBA se formó un Big Three o tridente exitoso: James Harden se sumaba a Kevin Durant y Kyrie Irving para jugar en Brooklyn Nets. Un total de tres campeonatos de la NBA y 24 presencias en el All-Star Game era el acumulado que ilusionaba a los fanáticos de Brooklyn, y que hoy los tienen primeros en el Este y con la clara opción de ganar su conferencia.
Como ellos difícilmente hay. Tal vez su más cercano en la tabla, Philadelphia 76ers, con Joel Embiid, Ben Simmons y Tobias Harris, podría ser considerado como otro trío importante. O bien los Clippers con Kawhi Leonard, Paul George y Serge Ibaka. Incluso el gran candidato que depende de la recuperación de sus figuras: Lakers con LeBron James, Anthony Davis y Dennis Schröder. Todos con más de cinco All-Star.
Pero más allá de de las estadísticas actuales, la posibilidad de que el “superequipo” no rinda es real. Solo hay que remontarse un par de años para conocer a aquellas franquicias que, aun teniendo estrellas, no lograron graficarlo.
Una supercaída
Cuando Brian Hill entrenaba a Orlando Magic (1993-1996), la llamada “era de Saquille O’Neal” estaba llamada a ser exitosa. Pero eso no pasó completamente. Con Shaq, Anfernee Hardaway y Dennis Scott no lograron plasmar las temporadas regulares en las instancias claves, y después de haber sido eliminados por Indiana Pacers, los de Orlando debían esperar hasta 1994-95 para lograr el objetivo.
Un récord de 57-25 los instaló en las finales, tras haber dejado en el camino a Celtics, Bulls e incluso Pacers, pero Rockets se impuso de manera inapelable con un 4-0 en las finales. En la que ya sería la última temporada de O’Neal, Chicago propinó cuatro derrotas consecutivas a los Magic.
Algo similar fue lo que pasó en la temporada 1998-1999 con los Rockets de Rudy Tomjanovich. A pesar de tener figuras como Charles Barkley, Hakeem Olajuwon y Scottie Pippen, fueron eliminados por 3-1 ante Lakers en playoffs. Estos últimos, de la mano de Phil Jackson en 2003-2004 eran los principales candidatos para quedarse con el título, pero en las finales fueron superados por los Pistons por 4-1. Una lesión de Karl Malone, y a pesar de tener nombres como Gary Payton, O’Neal y Kobe Bryant, se quedaron con las manos vacías.
El mismo equipo de Los Angeles, pero con Mike Brown (periodo corto) y Mike D’Antoni a la cabeza entre 2012 y 2014, y la llegada de Dwight Howard, Steve Nash, sumado a Bryant y Pau Gasol, el éxito estaba casi escrito. Sin embargo, la baja de Kobe por ocho meses impidió que el equipo pudiera alcanzar otro anillo.
El ejemplo más cercano de que no siempre un superequipo logra el objetivo es Oklahoma City Thunder (2017-2018), que con Billy Donovan como entrenador y jugadores como Russell Westbrook, Paul George y Carmelo Anthony, fue eliminado en primera ronda de playoffs y al año siguiente repitieron sin éxito ante Blazers.
El ascenso de la mano de los mejores
Antes de que muchos de los equipos no pudieran alcanzar la gloria, los Lakers de Kareem Abdul-Jabbar, Magic Johnson y James Worthy (1982-1989) sí cumplieron con ser un superequipo: lograron el título en 1985 (MVP Abdul-Jabbar), 1987 (MVP Magic Johnson) y 1988 (MVP James Worthy).
En paralelo, Larry Bird, Kevin McHale, Robert Parish y Dennis Johnson llevaron a Boston Celtics a ganar el anillo en 1984 y 1986, ambos con Bird como el jugador más valioso.
Pero si de estrellas-“éxito asegurado”-dinastía se trata, no hay equipo más campeón que Chicago Bulls. Con Phil Jackson como entrenador, y Michael Jordan, Scottie Pippen y Dennis Rodman como real Big Three, se coronaron en 1996 (MVP Michael Jordan), 1997 (MVP Michael Jordan) y 1998. ¿Quién fue el MVP esas finales? Sí, Michael Jordan.
Durante cinco años (2007-2012), los Celtics con Paul Pierce, Ray Allen y Kevin Garnett formaron un equipo que, ante su histórico rival, los Lakers, fueron campeones en 2008. Miami Heat con LeBron James, Dwayne Wayde y Chris Bosh hicieron lo propio en 2012 y 2013. Los Warriors de Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green y Kevin Durant tuvieron su propia serie en 2017 y 2018.