Ja Morant: de completo desconocido a presente (y futuro) de la NBA
El base de los Grizzlies es serio candidato al MVP de la temporada y apunta a convertirse en rostro de la liga. Pero hace un par de años, ni los expertos lo catalogaban de fenómeno.
Cuando se habla del surgimiento de una superestrella en la NBA, por lo general quienes encajan son jugadores que venían construyendo una carrera desde años antes de brillar en el baloncesto universitario de Estados Unidos. Son jugadores “con proyección” desde jóvenes, con cientos de ofertas de las más prestigiosas casas de estudio para representarlos en cancha y luego dar el gran salto a la NBA.
Ja Morant dio un salto distinto. Muy distinto.
Temetrius Jamel “Ja” Morant ser perfila hoy como pilar del futuro en los Memphis Grizzlies, y como una de las cartas seguras a ser uno de los grandes rostros de la NBA. Hay un indicador sobre esas expectativas: las camisetas con su nombre están entre las más vendidas durante los últimos meses.
En su época escolar, el base tuvo cero estrellas. Es etapa en la cual los mejores jugadores del país son clasificados según sus cualidades y potencial con estrellas (de una a cinco), y comienzan a tener ofertas de becas en las mejores universidades. Para los cazatalentos, el joven Morant no calificaba.
Never forget that this was Ja Morant’s recruiting profile@JaMorant 0 star recruit.
Never let someone else determine your worth… pic.twitter.com/xvdJc9wipW
— Ben Stinar (@BenStinar) July 2, 2021
En su último año escolar no contaba con ninguna oferta para llegar a la NCAA (National Collegiate Athletic Association, organiza los programas deportivos universitarios), hasta que la Universidad de Murray State tuvo un repentino interés en él. Un seleccionador fue a ver a uno de sus compañeros a Crestwood High School, pero su atención se fijó en Morant en un partido de tres contra tres la cancha de su escuela.
El primer año de Morant en la NCAA no tuvo mucho de excepcional, aunque dio indicios del talento que se estaba puliendo en el estado de Kentucky. En su segundo año, 2018-19, vino la explosión con el equipo de los Murray State Racers, tras promediar 24,5 puntos y 10 asistencias. Fue el primer jugador en promediar esos números desde que la NCAA comenzó a contar las asistencias en 1983.
“Antes estaba bajo el radar, me podía sentar en cualquier parte y nadie me decía nada. Ahora, saliendo a la tienda o voy a comer y alguien dice: ‘Hey, Ja!’. Antes me podía sentar ahí por 30 minutos o una hora y nadie me conocía”, dijo Morant previo al Draft de 2019, donde la mayoría lo veía siendo seleccionado por los Memphis Grizzlies con la segunda elección.
Así fue. El equipo de Tennessee decidió apostar por el joven atlético de clavados espectaculares, una figura que hace dos años era un completo desconocido, sería el encargado de liderar a la franquicia de cara al futuro.
En su primera temporada en la NBA, Morant ganó el premio al Novato del Año, promediando 17,8 puntos, 7,3 asistencias y 3,9 rebotes, superando las expectativas de los fanáticos de Memphis. Ya en su tercera temporada, está luciendo un promedio de 27,6 puntos, 6,6 asistencias y 5,8 rebotes con casi 50% de efectividad en sus tiros.
Ver esta publicación en Instagram
Su gran temporada lo llevó a ser seleccionado para el Partido de las Estrellas de la NBA. Con 22 años, se convirtió en el jugador más joven en la historia de los Memphis Grizzlies en lograr este reconocimiento.
{{noticia:127370}}