Columna de Fernando Tapia: “Ahora por los puntos”
“Con el técnico argentino Ricardo Gareca a la cabeza, los tres primeros partidos de este nuevo proceso han provocado el despertar de una nueva ilusión”, dice Fernando Agustín Tapia.
Llegó la hora. Una nueva Copa América se comienza a disputar en Estados Unidos, país anfitrión que se suma a otras cinco naciones de la Concacaf que junto a los diez integrantes de la Confederación Sudamericana buscarán el título continental.
En el caso de Chile, con el técnico argentino Ricardo Gareca a la cabeza, los tres primeros partidos de este nuevo proceso han provocado el despertar de una nueva ilusión.
El discurso simple y pragmático del entrenador, además de sus, hasta ahora, acertadas decisiones, han provocado que en poco tiempo el equipo vuelva a dar la sensación de poder competir en un alto nivel.
Nada alcanza a ensombrecer el optimismo que ha vuelto a despertar la Selección, ni siquiera la marginación de dos de los históricos. Por ahora Gary Medel y Arturo Vidal no fueron considerados por el jefe técnico, aunque tampoco descartados de plano para los desafíos futuros en las clasificatorias.
Las encuestas elaboradas por los medios dan cuenta de un fuerte respaldo de los hinchas a la determinación de Gareca. Pero, claro, en el fútbol los resultados mandan, y va a depender de lo que suceda en Estados Unidos para que este apoyo se mantenga.
Lo más importante, en todo caso, es que los jugadores que están parecen creer a pies juntillas al entrenador. Sus años de experiencia, y sus éxitos recientes con Perú generan respeto en el camarín. Hasta ahora el balance del trabajo del argentino es muy positivo.
Dos victorias en tres partidos y ocho goles a favor, además de pasajes de buen funcionamiento como no veíamos en años, prometen y generan altas expectativas. Pero hace falta refrendar todo esto en partidos oficiales, por los puntos.
Porque independiente de la seriedad con la que se enfrentaron los partidos de Marzo ante Albania y Francia, además del último con Paraguay en Santiago, éstos no dejan de ser amistosos, encuentros de preparación y de pruebas.
Y todos sabemos, incluyendo por cierto el propio Gareca, que cuando se trata de choques oficiales, la situación se hace mucho más exigente. Perú, Argentina y Canadá serán los primeros exámenes en serio de la Selección Chilena.
En el papel, y dado el crecimiento que ha mostrado el equipo en estos meses, un grupo en el que hay posibilidades ciertas de avanzar a cuartos de final. Después, estando allí, todo puede pasar. Sabemos que el objetivo prioritario está puesto en clasificar al próximo mundial, y que el propio técnico ve a la Copa América como una inmejorable oportunidad de consolidar a un grupo y una idea de juego.
Pero una vez iniciada la competencia, los resultados que ella arrojen serán determinantes para encarar un año decisivo, en el que Chile y las otras selecciones del continente conocerán sus posibilidades reales de estar en la próxima cita mundial.
Partir ganando en la Copa América es absolutamente imperioso. No sólo por la trascendencia del debut, sino porque al frente estará un rival directo. Perú se jugará la vida por todo lo que ese partido implica para ellos, con el morbo de la presencia de Gareca en el banco chileno. No será fácil, pero lo hecho hasta ahora genera confianza. Hay que seguir igual, pero ahora por los puntos.