Economía

AB, C1a y C1b: la nueva segmentación de los grupos socieconómicos altos

Imagen principal
POR jorge Román |

La nueva realidad de los hogares chilenos llevó a dividirlos en siete categorías. Ya no solo pesa el ingreso individual, sino el del grupo familiar. Y también los niveles educacional y ocupacional del sostenedor.

Los hogares que pertenecen al segmento socioeconómico más alto del país tienen un ingreso promedio de $6.452.000, según la nueva metodología de segmentación y clasificación socieconómica que se busca aplicar en Chile. Este nuevo mapeo de los consumidores es impulsado por la Asociación Nacional de Avisadores (ANDA) y la Asociación de Investigadores de Mercado (AIM), y fue presentado públicamente en los últimos días.

El nuevo índice socioeconómico calcula el grado de bienestar relativo de un hogar chileno. Para su construcción considera tres aspectos.

El primero de ellos es el tramo de ingreso per cápita equivalente, el que es ajustado de acuerdo con el tamaño del hogar. De esta forma, un hombre casado sin hijos que gana $1.000.000 al mes (el mismo sueldo que su mujer) estará en un segmento socioeconómico distinto que si ganara exactamente lo mismo (al igual que su mujer), pero tuviera dos hijos. Esto, porque en el primer ejemplo el sueldo familiar se divide entre dos personas y, en el segundo, entre cuatro. La diferencia está en que, con el modelo usado hasta hoy (ABC1-C2-C3-D-E), ambos casos clasificarían dentro del mismo segmento socioeconómico.

El segundo aspecto es el nivel educacional del principal sostenedor del hogar. A mayor grado de educación universitaria (o incluso de posgrado), mayor puntuación. Y el tercero es el nivel ocupacional de esta misma persona.

Con estos antecedentes, se crean siete categorías diferentes, en las que entran todos los hogares chilenos. Estas categorías se construyen con información pública, basada en la Encuesta Casen y la Encuesta de Presupuestos Familiares, explica el presidente de la ANDA, Fernando Mora. “Esto permite actualizar los datos cada vez que se actualizan alguna de estas encuestas, y seguir mucho mejor la evolución económica de las familias del país”, sostiene el ejecutivo.

Con esta nueva definición, el segmento superior, que hoy se conoce como ABC1, se desagrega en tres niveles diferentes.

El más alto es el AB, que además del nivel de ingresos descrito ($6.452.000 promedio mensual), está compuesto en 99% por profesionales con estudios universitarios que, además, en un tercio de los casos tienen títulos de posgrado. El 89% de los integrantes de estos hogares están cubiertos por el sistema de salud privado (isapres), mientras que el 92% cuenta con una tarjeta de crédito bancaria. Asimismo, ocho de cada diez tienen al menos un vehículo y el 89% posee un plan de telefonía móvil (el 11% restante ocupa prepago).

El grupo AB representa el 3% de los hogares del Gran Santiago, y se concentra casi exclusivamente en las comunas del sector nororiente de la capital: Vitacura, Las Condes, Lo Barnechea y Providencia

A este segmento le siguen dos nuevas categorías, denominadas C1a y C1b. La primera de ellas posee ingresos totales promedio mensuales de $2.739.000, mientras que la segunda llega a $1.986.000. Y si bien ambas tienen características similares (cada una representa el 6% del país), también tienen importantes diferencias.

En la Región Metropolitana, el C1a se concentra geográficamente en las mismas zonas que el AB (como Las Condes, Vitacura y Providencia), mientras que el C1b, si bien habita estas comunas, también lo hace en lugares asociados a segmentos más bajos, asociados al C2, como Santiago Centro y Ñuñoa, y también en áreas de Maipú, La Florida y San Miguel.

Asimismo, su capacidad de ahorro es diferenciada. Según el estudio “Chile a la luz de la nueva clasificación de GSE”, realizado por GfK Adimark, el 58% de los hogares C1a dice que sus ingresos le alcanzan bien y pueden ahorrar sin dificultades, mientras que ese porcentaje baja al 34% en el C1b. Asimismo, el 68% del C1a dice estar satisfecho con su sueldo, cifra que cae al 54% entre los C1b.

Más abajo en la nueva escala socieconómica están los segmentos C2 (con ingresos totales promedio mensuales de $1.360.000); C3 ($899.000); D ($562.000) y E ($324.000).

A juicio del presidente de la ANDA, esta nueva segmentación permite conocer mucho mejor las características de una clase media que no solo es mayoritaria en el país, sino que posee una construcción cada vez más diversa.

A nivel nacional, el segmento socieoconómico más numeroso es D, con el 37% de los hogares, seguido del C3, con el 25%. En un extremo, el AB representa apenas el 1% a nivel nacional.

Al analizar los datos por regiones, el D es el segmento mayoritario en 13 de las 15 zonas: solo en Antofagasta y en Magallanes es superado por el grupo socioeconómico C3, que tiene ingresos totales promedio de $899.000 al mes.

Entre los segmentos de mayores ingresos, las regiones de Tarapacá y Metropolitana son las que tienen mayor peso relativo de los grupos AB (1,9% y 2,8%, respectivamente) y de la suma de los sectores altos AB, C1a y C1b, con el 19,5% y 17,2%, respectivamente.

La educación le da más estabilidad a los segmentos”

En conversación con Primera pauta, el presidente de AIM, Andrés Varas, analizó los resultados del estudio y señaló que el C1b -hijos de la clase media que se educaron un poco más- por medio de mecanismos de endeudamiento logran parecerse al comportamiento de la elite. Sin embargo, por su historia de vida se sienten parte de la clase media, lo que corresponde al C2 y C3.

“La clase media es un grupo demasiado grande para poder etiquetarlo de una manera. La diversidad es enorme”, dijo.

Escucha la entrevista completa: