Los negocios del Viejo Pascuero
Su imagen se ha convertido en un ícono de estas fechas estivales. Viajes, academias y publicidad son algunos de los negocios que tiene Santa Claus a lo largo del mundo.
Luces, bastones, botas, renos, guirnaldas y pinos. Algunas casas hasta se aventuran con nieve falsa en sus jardines delanteros para comenzar a crear el ambiente navideño en esta calurosa fecha, una que muchos esperan durante gran parte del año y que es la favorita de muchos niños y también adultos. La Navidad.
Vacaciones con el hombre de rojo
Hay quienes deciden decorar sus casas sin tapujo alguno, y otros eligen una opción bastante más sugestiva y costosa: viajar a la tierra del Viejo Pascuero para vivir unas vacaciones que parecen sacadas de aquella película en la que Tim Allen personifica al canoso barbón de traje rojo.
La agencia de viajes especializada Nordic Visitor cuenta con distintos paquetes vacacionales en el hemisferio norte para aquellos que quieran empaparse con el espíritu navideño como Hollywood manda. El destino favorito es la Laponia finlandesa. Allí la oferta incluye paseos en trineos tirados por perros o renos, además de conocer la “casa de Santa Claus”.
Son dos los tours que la agencia ofrece, ambos de cuatro días y tres noches. El primero es “Aventura Navideña en Laponia”, un viaje parcialmente guiado donde se promete a los visitantes “comida sabrosa, buena compañía, actividades en la nieve y, por supuesto, Papá Noel”. Así es, una visita al famoso Santa Claus Village, donde el visitante “conocerá” al Viejo Pascuero en vivo y en directo. El itinerario detallado de los cuatro días se encuentra disponible en el sitio web y el valor en pesos chilenos es de aproximadamente $930.000 por persona.
Las reservaciones hay que hacerlas con anticipación, así que quien no haya alcanzado a agendar la suya tendrá que esperar un año para embarcarse en la aventura el 2019.
El segundo tour ofrecido es bastante similar, pero, a diferencia del primero, se estará realizando hasta marzo. “Aventura de Santa en Laponia” invita al turista a pasar cuatro días y tres noches en Rovaniemi, la “ciudad natal” de Santa Claus y el precio es de $850.000 pesos chilenos, aproximadamente. Además, entre las posibilidades que ofrece, está la opción de pasar una noche en un iglú de vidrio, con calefacción (¡gracias, Santa!), bajo el cielo nocturno del norte.
No es llegar y ponerse el traje
Aunque parezca sorprendente, en la Escuela de Santa Claus Charles W. Howard plantean que hay que adquirir ciertos conocimientos para calzar el vestuario de Santa Claus como se debe. Esta academia debe su nombre al actor estadounidense Charles Willis Howard, su fundador, famoso en Estados Unidos por personificar al Pascuero en tiendas y desfiles. “Se equivoca al pensar que Santa entra por la chimenea, Santa entra por el corazón”, es el lema del instituto ubicado en Michigan, Estados Unidos, que desde el 1937 ha formado a más de 82 generaciones de Pascueros.
Tom y Holly Valent son los actuales directores de la escuela, que dice no tener fines de lucro e imparte diversas clases como “Historia de Santa Claus”, “Vestimenta y maquillaje”, “Aplicación profesional de peluca y barba”, “Consejos de negocios”, “Un viaje a la tienda de Navidad más grande del mundo” y “Fabricación de juguetes en el taller de Santa”. Todos son conocimientos necesarios si se quiere ser un Pascuero excepcional en estas fiestas. “Ser Santa es un estilo de vida. Un estado de la mente. No una actuación… Nosotros estamos tratando de producir embajadores de amor y felicidad”, señaló Tom Valent a USA Today en diciembre de 2017.
El curso se desarrolla en tres jornadas y el valor de la matrícula va desde los US$ 525 para estudiantes nuevos, lo que equivale a $362.000 pesos chilenos, hasta US$ 995 ($685.000 en moneda nacional) para aquellas parejas nuevas que quieran transformarse en el Sr. y la Sra. Claus. El 2019 las clases están agendadas para los días 3, 4 y 5 de octubre, los cupos son limitados y las inscripciones se cierran el 12 de septiembre.
Pero la Escuela de Santa Claus Charles W. Howard no es la única que ofrece estas capacitaciones. Northern Light Santa Academy, ubicada en Atlanta, Georgia, cuenta con cursos en primavera y en otoño, los cuales funcionan de forma complementaria y entregan diferentes experiencias. “He asistido a otras dos escuelas de Santa de alto perfil, ambas eran muy buenas y enseñaron diferentes aspectos de Santa, pero tu entrenamiento en Santa no estará completo sin asistir a la Northern Lights Santa Academy.” Señaló Santa Barry W. al sitio web de la escuela.
Por último, The Santa Claus Conservatory da la oportunidad a los aspirantes a Santa de acceder a cursos online para Viejos Pascueros y cuenta ya con 2.100 matriculados. Son cuatro los niveles que se ofrecen, partiendo por uno gratis que entrega acceso a dos clases, luego está el nivel Plata y Oro. El más caro es el Platino, con un costo de US$ 347 ($240.000 pesos chilenos). La información respectiva de cada nivel se encuentra especificada en la página principal del sitio web.
Sanders Claus
La imagen de Harland David Sanders, fundador de Kentucky Fried Chicken (KFC), vistiendo el típico traje rojo con blanco, ya es un clásico en la noche de Navidad en Japón. Todos los años, desde que KFC abrió su primera tienda en el país asiático en 1970, se ha vuelto una tradición popular ir a cenar al afamado local de pollo frito de la cadena norteamericana.
En aquellos años, la Navidad no era una festividad relevante en Japón, ya que la población cristiana alcanzaba apenas el 2% del total. Además, el aterrizaje de KFC no fue sencillo y su entrada al mercado, con sólo un local, tardó meses en cumplir con las expectativas. Takeshi Okawara, gerente del local en aquel momento, recibió una propuesta: una monja de una escuela le preguntó si quería cooperar en una fiesta de Navidad sirviendo pollo frito. Okarawa contó al medio Business Insider que, tras aceptar la oferta, vistió el traje de Pascuero y bailó por el salón de clases con un balde de pollo frito en sus manos.
El evento fue un éxito. El gerente del local realizó el acto en otras escuelas y las ventas de la cadena de comida rápida subieron. Tras esto comenzó a vender la promoción del balde de fiesta navideño “Kurisumasu ni wa Kentakkii” (“Kentucky para Navidad”), que luego se volvió tradición. Año tras año se empezó a vestir la estatua del Coronel Sanders, ubicada en la entrada de cada local, como Santa Claus y cuando se acerca la conmemorativa fecha los japoneses hacen sus reservaciones.
Las opciones actualmente van más allá del clásico balde de pollo frito, que sigue siendo el preferido de muchos, ofreciendo también tortas de chocolate, costillas, pollo asado relleno e incluso vino. Pero a diferencia del resto del año, en esta fecha es necesario hacer una preorden, ya que, de no ser así, el cliente puede pasar la medianoche en la fila del local, esperando a que le entreguen su banquete navideño.