En la reforma previsional ya se instala el posible retiro de fondos de las AFP
Diputados opositores y oficialistas están planteando, mediante diversas fórmulas, la posibilidad que los enfermos terminales puedan acceder a sus fondos previsionales.
Un nuevo paso sumó la Reforma Previsional tras ser aprobada en la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, incluyendo puntos centrales para el Ejecutivo como la diferenciación por edad para los beneficios del pilar solidario y el aporte clase media. No obstante, el camino aún no está despejado y además se suma al debate un tema explosivo: la posibilidad de retirar los fondos tras jubilar en casos específicos.
Inicialmente la Sala de la Cámara debiera pronunciarse sobre el texto el martes 15 y miércoles 16 de octubre, pero los parlamentarios están a la espera de las medidas que prepara el Gobierno para cumplir su compromiso de incorporar “garantías” de mayor solidaridad en el sistema de pensiones. Se entiende que esto implica elevar la cotización adicional (hoy en 4,2%) para financiar seguros sociales que cubran riesgos de longevidad, rentabilidad u otros.
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, explicó que el compromiso se cumplirá, que los instrumentos se están diseñando, que hay conversaciones en curso y que “aún hay espacio para hacerlo antes de la votación en Sala”. Sin embargo, si esas indicaciones se presentan en Sala, al tratarse de temas que son competencia de la Comisión de Hacienda obligarán a retrotraer el debate a esa instancia.
Enfermos terminales y AFP
Mientras en tribunales se siguen ventilando casos de jubilados que piden acceder al uso anticipado de sus fondos previsionales, en la Comisión de Hacienda se conoció una propuesta en esa dirección impulsada por diputados de todos los partidos de la oposición.
La indicación busca que las personas puedan retirar todo o parte de sus ahorros previsionales por única vez, una vez que hayan cumplido la edad legal de jubilación, con el único objetivo de pagar el saldo insoluto de un crédito hipotecario. En este caso, las personas no recibirían el dinero, sino que sería traspasado directamente desde la AFP a la entidad financiera que otorgó el crédito.
Aunque la fórmula fue declarada inadmisible por irrogar gasto fiscal (al elevar el gasto en pensiones solidarias del beneficiario que no logre solventar una pensión), algunos de sus autores anunciaron que la volverán a presentar en Sala. Más aun: el debate generado abrió otro caso más complejo en que debiera admitirse el retiro de la totalidad de los fondos: el de enfermos deshauciados o en fase terminal.
El tema fue levantado por el diputado Pepe Auth (Ind.), quien dijo que es de toda justicia que, en estos casos dramáticos y extremos, es evidente que la persona no recibirá una pensión y debiera poder acceder a sus fondos. Su visión fue respaldada por otros parlamentarios de oposición, pero también el diputado Guillermo Ramírez (UDI) expresó su respaldo a la idea de estudiar el retiro de fondos en el caso de enfermos terminales. “En este caso sí existe una justificación para el retiro, pero no en el caso de los créditos hipotecarios”, sostuvo.
Por su parte, el diputado Alejandro Santana (RN) también brindó su respaldo y explicó que la derecha estaba trabajando para concretar una propuesta en tal sentido. Tras concluir la sesión, el diputado Eduardo Durán (RN) presentó en la Sala una resolución (suscrita por correligionarios y también parlamentarios DC, PPD, PEVD e independientes) que pide al Presidente Sebastián Piñera “evaluar el ingreso de una indicación” a la reforma de pensiones para que quienes acrediten sufrir una enfermedad terminal al momento de jubilar puedan retirar los fondos acumulados en sus cuentas de AFP.
La respuesta de Hacienda
Ante el surgimiento de este tipo de propuestas, el titular de Hacienda recordó que si bien siempre hay disposición a estudiar mejoras al texto, “no hay un solo instrumento para hacerse cargo de estos casos dramáticos”. Añadió que el Gobierno, a través de una serie de iniciativas, está tratando de cubrir ese objetivo y no solo a través de una reforma previsional. Citó el aumento de patologías incluidas en el AUGE, el seguro para enfermedades catastróficas del plan clase media protegida y la legislación sobre fármacos y bioequivalencias.
El ministro también respondió algunos planteamientos del diputado Auth, quien dijo que el tema del retiro de fondos fue instalado por el propio Ejecutivo con la propuesta incluida en la reforma para quienes retrasen su jubilación, y que el retiro de los ahorros previsionales con fines distintos a la pensión debe conllevar la pérdida de cualquier futuro apoyo estatal para el beneficiario.
Tácitamente, la autoridad descartó que la propuesta del Ejecutivo en la reforma constituya un precedente para otras medidas similares. Esto, dijo, porque el Ejecutivo propuso que parte del aumento del patrimonio de quienes postergan su jubilación pueda ser retirado voluntariamente en ciertos casos “para estimular ese ahorro mayor y aumentar el volumen de fondos que va a disponer la persona”. Además, precisó, esto se realiza ejerciendo “una atribución exclusiva del Ejecutivo“, que naturalmente no puede ser ejercida por los legisladores.
Felipe Larraín también desestimó que tenga sentido obligar a que en la eventualidad de que se permita el retiro de fondos de las AFP la persona renuncie expresamente a cualquier otro beneficio futuro de carácter previsional. Esto ya que si, con todo, la persona termina en la pobreza, “tendríamos un problema en que al final se recurriría a recursos públicos. Creo que la mera renuncia no es una garantía de que no se vayan a usar recursos fiscales”.