Esfuerzo fiscal de reforma previsional llegará a US$ 1.800 millones en régimen
Hacienda destacó que es la carga “más relevante de los últimos 30 años” en esta área. El informe financiero del proyecto revela un préstamo inicial de US$ 650 millones.
La nueva propuesta del Gobierno en materia de pensiones implicará una gran presión para las arcas fiscales, equivalente a US$ 1.800 millones en régimen, etapa que se alcanza en 2032, cuando concluye el período de 12 años en que se incrementa la cotización adicional de 6% a un ritmo de 0,5% anual.
Así se desprende del informe financiero de la indicación que concreta los anuncios formulados el 15 de enero por el Presidente Sebastián Piñera en cadena nacional. Esto, luego de que los ajustes anunciados para contribuir a la viabilidad de la iniciativa ingresaran en la tarde del lunes 20 de enero a la Cámara de Diputados.
Durante la jornada, la ministra del Trabajo, María José Zaldívar, se reunió con los parlamentarios de oposición que integran las comisiones de Trabajo de la Cámara y del Senado para recibir oficialmente su propuesta en materia de pensiones.
El punto clave a debatir es que la oposición busca que el 6% de cotización adicional se destine a solidaridad, asignando una parte a un componente de reparto para mejorar las pensiones de quienes ya jubilaron, y otra parte a ahorro colectivo para elevar las pensiones de quienes jubilarán a futuro. Esto, a diferencia de la iniciativa que impulsa el Gobierno, que divide el 6% en tres puntos porcentuales para ahorro colectivo y otros tres puntos a ahorro individual del trabajador. “Es una solución salomónica”, dijo el Mandatario, quien pidió aprobar prontamente la iniciativa.
El debate se retomará en la Comisión de Trabajo de la Cámara en la sesión del martes 21 de enero.
Presión fiscal
“Esta reforma en términos fiscales es el esfuerzo más relevante de los últimos 30 años, pero al mismo tiempo es responsable y ordenado. En un momento de estrechez fiscal como el actual, podremos hacer frente a obligaciones fiscales en pensiones que, en régimen, ascienden a US$ 1.800 millones. Y tenemos que sumar el esfuerzo en curso para elevar en 50% las pensiones del pilar solidario, aprobado por el Congreso en diciembre, que implica US$ 1.400 millones”, afirmó el director de Presupuestos, Matías Acevedo.
Añadió que “estamos hablando de un esfuerzo total US$ 3.200 millones, sumando además el préstamo que realiza el Fondo de Reserva de Pensiones durante un período de cuatro años. Este es un esfuerzo fiscal relevante pero responsable, con sustentabilidad, para dar una respuesta seria y seguir cuidando la eficiencia del gasto público”.
El ministro de Hacienda, Ignacio Briones, detalló que las materias más importantes de gasto para el Fisco en esta reforma son tres: aporte para el inicio del nuevo sistema comprometido en el protocolo del Presupuesto 2020, desembolso del Estado para cotizaciones en su rol como empleador y menores ingresos tributarios. “El Fisco recauda impuestos de las empresas y cuando éstas tienen que cotizar o hacer pagos para sus trabajadores, van a haber menores ingresos tributarios”, explicó, añadiendo que son impactos que crecen en el tiempo.
Ya que la cotización extra de 6% se entera en 12 años, en la fase inicial no habrá recursos suficientes para mejorar pensiones desde el fondo de ahorro colectivo, por lo que el Fisco se comprometió a “poner recursos para acelerar la transición”. Esto se concretará mediante un préstamo total por hasta US$ 650 millones que hará el Fondo de Reserva de Pensiones (FRP) durante los primeros cuatro años de operación del fondo de ahorro colectivo (que acumulará el 3% que se solidariza).
El aporte es necesario ya que las proyecciones indican que en sus primeros años ese fondo, desde el cual se obtendrán recursos para mejorar las pensiones actuales, podría ser deficitario. A partir del año cinco se comienza a pagar ese crédito bajo las condiciones acordadas cuando se giren los montos. Ya que el FRP acumula a noviembre de 2019 US$ 10.646 millones, se estima que su sustentabilidad no se vería afectada por dicho préstamo.
Otro factor de gasto para el Estado, en régimen, es el pago de la cotización adicional de los funcionarios públicos para pensiones y seguro de dependencia (US$ 726 millones) y menores ingresos tributarios debido a que las empresas destinan mayores recursos a previsión (US$ 883 millones). También se suman menores excedentes entregados al Fisco por parte de las empresas públicas (US$ 60 millones).
El informe financiero también desglosa otros gastos comparativamente menores asociados al financiamiento del subsidio de dependencia (US$ 339 millones), mayor fiscalización y regulación (US$ 560 mil), financiamiento del funcionamiento del organismo público que administrará el componente colectivo solidario (US$ 1,7 millones), entre otros.
¿Duplicidad o suma de beneficios?
Un tema que genera controversia es el hecho de que, en la propuesta del Gobierno, los nuevos beneficios para quienes ahorren en el fondo colectivo se incorporan dentro de la pensión base. De este modo, se genera una reducción del sistema de pensiones solidarias que proviene de aquellas personas que son beneficiarias de ambos sistemas.
Así, por ejemplo, para el año 2032 el informe financiero calcula en US$ 227 millones el ahorro que se producirá para el Fisco por este concepto, el que llega a US$ 512 millones a 2050, último año de la proyección. Como contrapartida, el gasto para el Estado como empleador asociado al 6% y seguro de dependencia tiende a estabilizarse, ya que sube de US$ 726 millones en 2032 a US$ 758 millones en 2050, lo que está asociado más bien al crecimiento vegetativo de los beneficiarios.
Esta fórmula ya fue rechazada por la oposición durante el debate de los anteriores beneficios de la reforma del Ejecutivo para la clase media y las mujeres. Ahora, el documento de acuerdo opositor establece que “la cotización adicional de 6% y los beneficios que se otorguen con cargo a ésta, no deberán disminuir los beneficios del pilar solidario, es decir, no deberán formar parte de la pensión base”.