¿Cuánto impacta una cuarentena en una comuna? Ya hay datos
Investigadores UC, entre ellos el exministro Rodrigo Valdés, revelan que la actividad en las zonas confinadas casi duplica el retroceso de lugares sin restricción.
Aunque el desplome económico asociado a las restricciones a la movilidad era esperado, hasta ahora no había datos específicos para Chile. Una investigación preliminar revela que una comuna en cuarentena de un mes completo registra un retroceso del orden de 10% a 15% en su actividad, casi el doble de la caída que experimentan las que no tienen esa restricción.
El análisis lo realizaron los académicos de la Pontificia Universidad Católica Eduardo Undurraga, Kenzo Asahi y Rodrigo Valdés (exministro de Hacienda) y de la Universidad Adolfo Ibáñez Rodrigo Wagner. Según sus estimaciones, una cuarentena de tres a cuatro meses reduciría la actividad económica en una forma casi equivalente al impacto anual de la crisis subprime de 2009.
Así, las cuarentenas podrían explicar la mitad de la caída de la economía; el resto proviene del comportamiento de las personas ante los riesgos de contagio y del efecto de otras medidas, como el cierre de escuelas y el menor consumo.
Los hallazgos podrían ayudar a definir la aplicación y levantamiento de restricciones a la movilidad en conurbaciones y grandes áreas urbanas, como las 32 comunas del Gran Santiago, que en mayo fueron puestas bajo cuarentena total.
Qué sirve y qué no
“Aunque al inicio de la pandemia la ciencia se enfocó en los mecanismos de contagio y cuantificar escenarios posibles de impacto de la pandemia, ahora hay un esfuerzo por revisar estos primeros seis meses buscando qué ha funcionado bien y qué no, sobre todo porque hay varios países en procesos de reapertura”, explica uno de los autores, el especialista en economía de la salud Eduardo Undurraga, sobre las motivaciones de este estudio.
Los investigadores analizaron la recaudación mensual del IVA (como indicador de actividad) en los tres últimos años en 170 comunas de todo Chile, excluyendo las muy pequeñas, rurales y las tres metropolitanas donde bancos y mineras pagan patentes. Luego cruzaron estos datos con la información local de población, vigilancia epidemiológica y movilidad.
Entre abril y mayo la recaudación de IVA retrocedió entre 25% y 30% en las comunas bajo cuarentenas y 15% en las zonas sin esa restricción. No se detectaron diferencias significativas cuando se trata de comunas que forman parte de conurbaciones o aquellas independientes. El impacto económico tampoco difiere según la incidencia de casos de Covid-19 o las muertes debido al virus.
Aunque el análisis debe sortear la revisión de pares, los investigadores admiten algunas limitaciones. Entre ellas, la opción de pago diferido del IVA y que no se captura la informalidad.
Cuarentenas “dinámicas”
La evidencia epidemiológica apunta a que las cuarentenas en zonas específicas que se activan y desactivan (que fueron conocidas en Chile como “dinámicas”) reducen la expansión de la epidemia.
“Pero la realidad es que existen interdependencias económicas y sociales entre comunas, lo que es especialmente visible en las ciudades y conurbaciones. Esta interdependencia significa que permanecen activas redes de contagio, aunque esté cerrada una comuna y la gente que vive en ella no pueda salir. Y estos focos de contagio se concentran, por ejemplo, en las áreas de intercambio, como los puntos de traslado y de comercio”, explica Undurraga.
“Es muy probable que sigamos viendo resurgimientos del virus en zonas donde ya estuvo controlado. Estos focos tienen que controlarse para que no surja un incendio. ¿Cómo hacerlo de la mejor manera? Lo que nos sugiere esta investigación es que la caída económica es proporcional a la población bajo control”, resume Undurraga.
“Básicamente, implica decir que son los epidemiólogos los que tienen que decidir, porque lo económico es más o menos neutro en esto”, concluye.