La recuperación del empleo se estanca en diciembre

Según la Encuesta UC, el deterioro se ha concentrado en la Región Metropolitana. Por otra parte, el teletrabajo pierde peso en el mercado laboral.

Tras el enorme retroceso en la economía, con una variación de -15,5% anual en mayo de 2020, se proyectaba una recuperación rápida con cifras azules en el último trimestre del año. Pero los datos no han estado a la altura de ese ligero optimismo. “Cuando se mira el Imacec desestacionalizado, se ve que en octubre y noviembre se paró el proceso de recuperación parcial que se había iniciado en junio“, dijo a PAUTA el coordinador macroeconómico de ClapesUC, Hermann González.

Este freno también se aprecia en la creación de empleo. Según datos del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales de la Universidad Católica, la tasa de ocupación (el porcentaje de las personas que trabajan respecto de la fuerza laboral) fue de 46,5% en diciembre, marginalmente inferior al 46,8% de la medición anterior realizada en octubre. “En diciembre se estanca la creación del empleo que venía registrándose desde  el punto más bajo de la crisis, en julio”, dijo David Bravo, quien dirige la entidad. 

La encuesta revela que que el estancamiento en la ocupación se registra solo en la Región Metropolitana. Las zonas norte, centro y sur mantienen la tendencia de creación gradual de puestos de trabajo, pero no logran compensar el deterioro de la capital.

¿Qué tanto incide el retroceso metropolitano a fase 2 en diciembre? “Sabíamos que la recuperación no está garantizada. Los datos parecen indicar que esto tiene mucho que ver con las restricciones sanitarias. El hecho de que el empeoramiento esté liderado por la Región Metropolitana parece indicarlo. Seguimos con una relación estrechísima entre salud y economía: a mayores restricciones sanitarias pareciera haber más problemas de empleo”, comentó Bravo.

Informales y teletrabajo

La debilidad del mercado laboral se revela también en que, como ya muestran las cifras oficiales, la encuesta de la UC apunta a que es la ocupación informal (sin contrato ni seguridad social) la que lidera la creación de empleo.

Según esos datos, del total de puestos de trabajo perdidos, se ha recuperado el 26%, que corresponden a casi 700 mil empleos netos. De estos, 198 mil son plazas asalariadas, 462 mil independientes y 39 mil corresponden a trabajadoras de casa particular.

En diciembre, unas 900 mil personas habrían estado buscando un puesto si no hubiese habido una crisis sanitaria, de los cuales 547 mil habrían sido mujeres. Además, unos 122 mil están con contratos suspendidos o jornadas reducidas en el marco de la Ley de Protección del Empleo.

En este escenario, el uso del trabajo a distancia parece cobrar menos relevancia. Si en julio quienes declararon trabajar remotamente al menos una hora semanal llegaron al 26% del total, con un promedio de 44 horas semanales en promedio, en  diciembre el teletrabajo se redujo a 20,1% y con un promedio de 30 horas semanales. Se trata de 1,48 millones de trabajadores, de los cuales 799 mil son mujeres.

“Estos datos son coherentes con lo que declaran las personas en encuestas anteriores, en el sentido que mayoritariamente no creen que el trabajo que desempeñan se pueda realizar remotamente. Pueden estar incorporándose a actividades que no pueden realizarse a distancia”, opinó David Bravo.