A pesar de subsidios, creación de empleo en el Gran Santiago pierde fuerza
Encuesta del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile muestra que puestos de trabajo creados el último trimestre de 2020 fueron inferiores al del tercio anterior.
A diferencia de lo que reportó la encuesta de empleo de la Pontificia Universidad Católica de Chile sobre un estancamiento en la creación de empleo en diciembre a nivel nacional, pero concentrado en la Región Metropolitana, las cifras para el último trimestre de 2020 para el Gran Santiago del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile revelan que el empleo sigue creciendo, pero que ese dinamismo ha perdido velocidad.
La diferencia es sutil, porque la realidad que ambos estudios describen es que luego de un primer “tirón” de recuperación luego de que la economía tocara su punto más bajo en mayo (-15,5%), la debilidad del mercado laboral se mantiene: no se están destruyendo puestos de trabajo, pero su creación tiene bajo ritmo y se concentran en el sector informal.
La directora del Centro de Microdatos, Lorena Flores, explicó que en el trimestre octubre-diciembre se crearon 178 mil nuevos empleos en el Gran Santiago, los que en el tercio anterior sumaron 230 mil. “No observamos retrocesos en términos de ocupados, todavía vemos aumentos. También hay alzas leves en tasas de participación laboral”, comentó, y precisó que estas son buenas noticias en un escenario que aún se aprecia frágil.
Consultada sobre el efecto de las mayores restricciones sanitarias en la región, estimó que es “una buena hipótesis”, ya que habría cierta afectación para actividades como comercio, restaurantes y otros relacionados debido a la cuarentena de fin de semana y los toques de queda más temprano. “Se puede pensar que esto produce una velocidad más lenta en la recuperación del empleo”, dijo.
Repensar subsidios
De los 178 mil empleos creados en trimestre, solo 63 mil fueron para mujeres. “Ellas están encontrando algo más de empleo cuando vuelven al mercado laboral respecto del trimestre anterior, pero tienden a quedar desempleadas por periodos más largos que los de los hombres“, comentó la economista.
Expresó su preocupación por la efectividad del subsidio al empleo, por dos motivos. Primero, porque se han entregado a diciembre poco más de 300 mil, aunque la meta del Gobierno es de un millón. Y segundo, porque solo 30% de ellos van a mujeres, pese a que el monto es levemente mayor para quien las emplea. “No observo que el subsidio esté cumpliendo un rol importante y el monto mayor para las mujeres no está surtiendo efecto. Es una oportunidad de repensar el subsidio y los apoyos a hogares cuya fuente principal de subsistencia es el empleo”, sostuvo.