Senadores opositores piden al CFA auditar las cifras fiscales 2020
La solicitud se enmarca en discrepancias que se arrastran desde el debate del Presupuesto 2021, que aunque se despachó tras un acuerdo fue llevado por el Gobierno al TC.
Un pronunciamiento del Consejo Fiscal Autónomo (CFA) sobre cifras oficiales de las finanzas públicas 2020 -entregadas por la Dirección de Presupuestos- solicitaron los senadores Carlos Montes (PS), Ricardo Lagos Weber (PPD) y Jorge Pizarro (DC). Pizarro es el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta.
La petición apunta a aspectos específicos del balance fiscal 2020 informado por Dipres, la ejecución presupuestaria general y aquella asociada al fondo covid que financia los gastos asocidos a la emergencia sanitaria. Entre otros, se busca identificar si el balance estructural y la ejecución del gasto son compatibles con los compromisos adoptados en el acuerdo del 14 de junio entre el Gobierno, Chile Vamos, el PS, la DC y el PPD, que fijó el marco de gasto en la pandemia (US$ 12 mil millones en dos años) y la trayectoria fiscal.
También se pide que el CFA se pronuncie sobre la ejecución presupuestaria a noviembre, que según cálculos que adjuntan los parlamentarios arroja un déficit de 3,6% del PIB (en lugar del 6,5% informado oficialmente), debido a “la omisión de algunos registros y cambios discrecionales en la metodología”.
La solicitud se enmarca en discrepancias sobre las cifras fiscales entre el Gobierno y la oposición, que se agudizaron en el reciente debate presupuestario.
Contexto complejo
La petición de los senadores opositores al CFA se concretó el 29 de enero, el último día de trabajo legislativo. Solo existe un precedente de una acción similar: en 2019, el senador Lagos Weber le pidió su opinión respecto de la inclusión en el Presupuesto 2020 de ingresos de la reforma tributaria aún no legislados.
Tras consultar a Contraloría si le correspondía pronunciarse y recibir una respuesta afirmativa, el CFA objetó esa decisión de Hacienda, que corrigió el asunto. El episodio sirvió para ratificar que la instancia asesora está facultada para opinar sobre el nivel y composición de los gastos e ingresos del Fisco, que son la base de la política fiscal.
Pero la decisión de los parlamentarios opositores también muestra que las diferencias sobre las cifras oficiales en materia fiscal persisten. En el reciente debate presupuestario los problemas con los números fueron una constante, partiendo porque el Presidente Sebastián Piñera dijo que el gasto crecería 9,5% aunque el acuerdo fiscal apuntaba a que se mantuviera respecto de 2020 (crecimiento 0%), lo que fue ratificado luego por la Dipres.
Además, la discusión presupuestaria estuvo teñida por controversias entre el senador Montes y el director de Presupuestos, Matías Acevedo. Todo se saldó en un acuerdo de último minuto, faltando un día para que se cumpliera el plazo constitucional de despacho del Presupuesto.
Pero a la semana siguiente el Gobierno acudió al Tribunal Constitucional, que terminó acogiendo la impugnación del Ejecutivo a nueve glosas del Erario 2021 que habían sido aprobadas por el Congreso.
La decisión fue leída desde la oposición como un “quiebre del fair play“, al estimar que si bien el requerimiento ante el TC es una facultad del Ejecutivo, el acuerdo final para despachar el Presupuesto cubría todas las materias de discrepancia y no solo algunas.
Además, se criticó que el Ejecutivo en su requerimiento reclamara por la modificación de una ley permanente a través de una norma transitoria (como el Presupuesto), cuando esa fórmula fue usada por el Ejecutivo para alterar el orden de subrogancia en la Contraloría, aunque en ese caso el vehículo transitorio fue el reajuste del sector público.