Gobierno espera “mejorar” nuevo royalty minero en el Senado
La iniciativa fue despachada de la Cámara de Diputados con un respaldo transversal, No hubo respaldo para dejar sin efecto la invariabilidad tributaria que poseen los contratos de la minería.
“Nosotros estamos de acuerdo en tener una conversación respecto de la tributación de la minería, pero tenemos que hacerlo en serio. Y espero que encontremos ese espacio en el Senado”, dijo el biministro de Minería y Energía, Juan Carlos Jobet, luego de que la Cámara de Diputados despachara a segundo trámite el proyecto que crea un nuevo royalty minero. La decisión coincidió con un nuevo récord del cobre, que se transó en US$ 4,54 la libra.
La autoridad reafirmó la visión que ha sostenido sobre revisar “con calma y seriedad” el marco impositivo de la industria minera, forzado por la aprobación en particular de este nuevo tributo, que contó con el respaldo de parte del oficialismo. Esto aunque en distintos momentos del trámite, el Gobierno ha hecho reserva de constitucionalidad, ya que los parlamentarios no tienen facultades para proponer cambios en materia tributaria.
La votación en la Sala de la Cámara fue especialmente compleja, por las mayorías que concitó el nuevo impuesto para la explotación de todos los minerales, con tasa de 3% sobre las ventas netas (descontando algunos costos como remuneraciones y transporte). Tuvo 78 votos a favor, 55 en contra y 4 abstenciones.
Luego de sucesivas votaciones sobre el destino de los recursos recaudados y la fórmula para incrementar la carga tributaria de acuerdo a bandas de precio, se llegó a un verdadero punto de quiebre en esta materia: la invariabilidad tributaria que cuentan los contratos de la industria minera, que implica que el Estado no puede cambiar unilateralmente el rango de 5% a 14% del royalty vigente (que grava las utilidades) ni aplicar otros tributos a la industria hasta que venzan dichos contratos.
La indicación para derogar la invariabilidad, impulsada por el presidente de la Comisión de Hacienda, el diputado Daniel Núñez (PC), ya había sido rechazada en esa instancia y tampoco logró respaldo en la Sala. Esto, a pesar que al intervenir en la sesión, el biministro Jobet enfatizó que “no es verdad” que el proyecto permitiría recaudar más recursos para aliviar a las familias chilenas durante la pandemia, debido precisamente a que “más del del 80% de la producción de cobre está sujeta a contratos de invariabilidad que impiden que cualquier modificacion a la ley tenga efectos antes de 2024”.
¿A qué se destinan los recursos?
La respuesta puede resultar extraña desde el punto de vista jurídico, ya que la Constitución vigente establece los tributos que se recauden “no podrán estar afectos a un destino determinado“.
El proyecto de nuevo royalty define que del total recaudado, un 25% se destinará a un fondo de convergencia regional que financiará proyectos de desarrollo en las comunas donde se emplacen los yacimientos y el 75% restante financiar iniciativas en las regiones mineras.
Pero también se establece un mecanismo en que la carga tributaria aumenta en razón del precio promedio anual de la libra de cobre, con tasas marginales que van aumentando a 15% cuando el precio supera US$ 2 la libra y 75% cuando se ubica en US$ 4 la libra. “La carga impositiva de las empresas de cobre en Chile, que hoy alcanza al 40,3%, está en línea con otros distritos mineros relevantes. Algo no está bien en un proyecto que busca elevar esa carga a 82%”, dijo Jobet.
El proyecto precisa que cuando lo recaudado supere el 3% de las ventas netas, el excedente se asignará a una renta básica universal de emergencia en el contexto de la pandemia. Cuando concluya el estado de excepción constitucional de catástrofe por Covid-19, los montos ingresarán a las arcas fiscales.