Al Gramo: ”Los inversionistas chilenos son tremendamente conservadores”
José Manuel Moller, CEO de la startup que acaba de levantar US$ 8,5 millones, criticó la aversión al riesgo de los fondos locales. Pero ve señales de cambio.
El emprendimiento nacional está viviendo un buen momento. En una sola semana diversas startups, como Notco, Protera, Global 66 y Al Gramo, anunciaron importantes rondas de inversión principalmente con fondos internacionales, que les permitirán escalar sus productos y servicios a distintas partes del mundo.
Sin embargo, esta ola está levantando algunas interrogantes respecto del rol de los inversionistas privados chilenos en el apoyo a las startups locales.
“Si hay alguien que ha hecho bien la pega es el Estado a través de Corfo y Start Up Chile, ejemplos de capital de riesgo que recién ahora están cosechando lo que sembraron (…) El Estado ha tenido un rol súper activo, pero los privados están al debe”, dijo en Pauta de Negocios, de Radio PAUTA, José Manuel Moller, CEO y fundador de Al Gramo. Esta empresa cerró esta semana una ronda de US$ 8,5 millones liderada por el fondo mexicano Dalus Capital, y donde también participaron los fondos Angel Ventures (de Nestlé), Femsa Ventures (subsidiaria de la matriz controladora de Oxxo), Volta Circle, Impact Assets, University Venture Fund, y Century Oak Capital.
“Transversalmente, los casos de éxito en Chile no tienen inversionistas locales, o muy pocos”, enfatizó. “Los inversionistas chilenos son tremendamente conservadores, y por eso no han podido subirse al carro de ninguno de los emprendimientos grandes, porque esperan que esto les rente lo mismo que la minería, o la construcción, desde el día uno, y no se dan cuenta que esto es riesgo”, criticó Moller.
El emprendedor aseguró que en sus inicios hubo privados locales interesados en invertir en Al Gramo, pero ofrecían montos mucho menores a los que se pueden conseguir en otros países, por lo que no fue posible avanzar.
“Mi consejo para las emprendedoras y emprendedores chilenos hoy es que busquen inversión privada afuera”, señaló Moller. Sin embargo, añadió que la nueva generación de emprendedores exitosos que se conoce hoy está permitiendo que se mire a Chile con otros ojos, y hace más fácil el camino para levantar fondos. “Están derribando mitos que beneficiarán a toda la generación que venimos abajo, y que plantean a Chile como un lugar de inversión”, señaló.
Expansión internacional
Al Gramo nació en 2013 con dispensadores de marca propia en canales tradicionales, que permitían comprar en porciones flexibles según las necesidades, con un modelo sustentable y respetuoso con el medioambiente. En 2018, cuenta Moller, comenzó el despegue, cuando decidieron acercarse a los actores más grandes del mundo, tecnologizando su oferta. Hoy Al Gramo se define como una plataforma tecnológica que busca ayudar a las empresas y consumidores a que puedan comprar en cantidades flexibles, más barato y sin generar excesos.
El modelo de venta a granel viene de los años 40, pero el desafío de la empresa era traducirlo en una experiencia del siglo XXI, con tecnología, y que permitiera a los grandes actores entrar. Su meta es convertirlo en un modelo masivo, y para eso han ido incorporando tecnología en todas las etapas, lo que les permite ser más económicos y competitivos, señaló.
Esta última ronda de inversión estará destinada principalmente a abrir nuevos mercados. Al Gramo hoy opera en Chile, donde cuenta con alianzas con Unilever, Nestlé y Walmart Chile, y tienen proyectos piloto en Nueva York e Indonesia. Moller hoy se encuentra en Inglaterra, donde espera iniciar otro proyecto piloto en Londres y también en México. El CEO de la empresa especificó que luego de validar estas iniciativas, “viene una etapa de crecimiento agresivo, creciendo y sumando productos”. Por último, indicó que si bien el primer paso es entrar a los grandes retailers, están en desarrollo tecnológico para el próximo año iniciar pruebas en tiendas de conveniencia.
Vea la entrevista completa de José Manuel Moller, CEO y fundador de Al Gramo