Proyecto Dominga reconoce interés por una alianza portuaria con CAP
El gerente de asuntos corporativos de Andes Iron, Francisco Villalón, dice que la oposición a la iniciativa pese a la aprobación en una instancia oficial “pone en jaque nuestra institucionalidad ambiental”.
La aprobación por parte de la Comisión Ambiental de Coquimbo del proyecto minero Dominga, que busca extraer concentrados de hierro y cobre en la comuna de La Higuera, sigue generando polémica luego de ocho años de tramitación.
El 75% de la propiedad de Andes Iron pertenece a la familia Délano Meléndez, cuya cabeza, Carlos Alberto Délano, está entre los dueños de Penta. La iniciativa considera una inversión por US$ 2.500 millones, comenzó su tramitación en 2013, y luego de pasar por el Servicio de Evaluación Ambiental, fue derivado al Comité de Ministros del gobierno de la expresidenta Michelle Bachelet. En dicha instancia fue rechazado, lo que provocó la salida del gabinete económico dirigido entonces por Rodrigo Valdés. Tras eso, los controladores llevaron el caso a la justicia y el Tribunal Ambiental de Antofagasta pidió retrotraer el proceso a la Comisión Ambiental de Coquimbo, entidad que la semana pasada aprobó el proceso. Esta última decisión despertó el rechazo de buena parte de la oposición, que considera que el proyecto será dañino para el medioambiente.
Francisco Villalón, gerente de asuntos corporativos de Andes Iron, enfatizó que el proyecto Dominga ha cumplido todos los requerimientos de la autoridad, y ha dado respuesta a todas las inquietudes presentadas por diversos servicios públicos. Hay pronunciamientos favorables de tribunales de justicia para su desarrollo, por lo que “este tipo de problemas que enfrentamos pone en jaque nuestra institucionalidad ambiental”, advirtió en entrevista con Pauta de Negocios, de Radio PAUTA.
El ejecutivo pidió que en Chile se respete y se haga cumplir la ley. “No nos parece que la justicia haya que respetarla solo cuando a uno le conviene, que es lo que hemos visto”, puntualizó.
Al respecto, explicó que el tribunal que acogió los recursos del proyecto Dominga fue el mismo que rechazó Pascua Lama, pero las declaraciones de diversos grupos y de políticos en un caso y otro fueron totalmente distintas. “Es legítimo tener distintas opiniones, lo que no es legítimo es utilizar información falsa”, sostuvo Villalón.
Compartir puerto con CAP
“La operación minera está a lado de la carrera, en el kilómetro 542. Un proyecto al lado de la carretera, en una zona intervenida, difícilmente podemos encontrar zonas más intervenidas que una carretera, ahí está la operación de Domnga. Las inquietudes están dadas por el puerto”, comentó.
Explicó que pese a que las inquietudes están dadas por la ubicación del puerto, hoy por esa ruta de navegación transitan dos mil buques al año que vienen del sur, y lo hacen a cinco kilómetros de la Reserva Nacional del Pingüino de Humboldt. Mientras, la propuesta de Dominga consideraría un buque a la semana, el cual transitaría a 30 kilómetros de dicho lugar. “Creemos que las declaraciones que se han realizado en torno a este proyecto son, al menos, destempladas y desmedidas”, advirtió.
Una de las mayores críticas al proyecto Dominga es la construcción de un nuevo puerto en una zona que ya existen otros, pese a que el ordenamiento territorial de la comuna permite la construcción de tres puertos. El gerente de asuntos corporativos de Andes Iron señaló que la idea les parece razonable.
En el sector ya existen operaciones portuarios de CAP con el puerto Cruz Grande, lo que les permitiría concentrar la operación en un solo terminal.
“Para ser transparente: hemos tenido algunas conversaciones [con CAP], pero no se han iniciado aún conversaciones formales en este punto en particular, pero sí entendemos que hay una voluntad de que eso así ocurra”, reveló.
Francisco Villalón contó que una alianza haría que los costos del proyecto Dominga aumenten. No obstante, agregó que en la compañía entienden que hay que hacer mayores esfuerzos para desarrollar una minería más sustentable y moderna.
El ejecutivo, asimismo, desestimó las críticas que se han dado en torno a la iniciativa, y explicó que Dominga es “un buen proyecto”. No solo por la generación de empleo, sino también porque plantea utilizar 100% de agua de mar desalada, y compartir agua con las comunidades, atacando el problema de la sequía que afecta al lugar. La iniciativa considera también la contrucción de un centro de investigación científica donde se estudiaría el rescate y cuidado del pinguino de Humboldt, hoy en peligro de extinción, hoy necesario para la zona.
Vea la entrevista completa con Francisco Villalón, gerente de asuntos corporativos de Andes Iron