La Iglesia y el cine reciente
En Chile, El Bosque de Karadima y El Club son las cintas relacionadas con las denuncias de abusos. Hay más ejemplos afuera.
Los abusos cometidos por sacerdotes revelados en los últimos años han sido recogidos por la gran pantalla, en distintas películas que reflexionan sobre las repercusiones en las vidas de las víctimas y el manejo de la Iglesia Católica al respecto.
Entre las cintas más destacadas está La duda, de 2008 y con Meryl Streep, basada en una obra de teatro que juega con lo que se dice y se oculta cuando un sacerdote parece ser demasiado cercano a un niño.
En 2014 se estrenó, con aplauso de la crítica, Calvario, protagonizada por Brendan Gleeson como un sacerdote irlandés que debe enfrentar una amenaza de muerte de un hombre que fue abusado por otro miembro de la Iglesia.
En 2015 pareciera que el tema se volvió global: apareció Spotlight, la cinta ganadora del Oscar sobre la investigación de periodistas del Boston Globe, que encontraron una sistemática defensa de la Iglesia a los abusadores.
En Chile, ese mismo año aparecieron dos cintas que recogieron lo sucedido al respecto en nuestro país. Una, inspirada en hechos reales, El bosque de Karadima, de Matías Lira, sobre los abusos realizados en la parroquia de El Bosque. Fue un éxito de audiencia.
Y El Club, de Pablo Larraín, que se centra en un grupo de sacerdotes que la Iglesia mantiene recluidos en una casa, tras cometer abusos y otros delitos.