Le chalet: asesinatos y montaña en francés
La serie, con aires del género “slasher”, llegó a Netflix con críticas regulares, pero convertida en un éxito de audiencia.
A veces sucede: una serie que no logra convencer a la crítica se convierte en un hit de audiencia. Y eso sucedió con la francesa Le Chalet. Tras su estreno en el canal France 2 no convenció con totalidad a los expertos, pero un promedio de tres millones de de espectadores por semana sintonizaron la historia de seis episodios, para descubrir quién era el asesino que iba eliminando uno a uno a los protagonistas. Desde su reciente llegada a Netflix, se ha transformado en un recomendado que va de boca en boca -o de Twitter a Twitter- en lugares como Gran Bretaña. Porque Le Chalet puede no ser brillante, y a veces medio boba, pero es altamente adictiva, material perfecto para un minimaratón en el servicio de streaming.
La serie francesa usa algunos elementos del género slasher, aunque libremente. Este es un grupo de amigos que se junta en el recluido pueblo de montaña llamado Valmoline, donde pasaron su infancia, para una boda. Están alojados en un renovado chalet, cuando pronto comienzan a suceder accidentes extraños, y quedan totalmente aislados. Uno a uno van sufriendo desapariciones, ataques y demases. Quizás no hay tantos cuchillos como una slasher tradicional, pero sí pueden contar con todo tipo de asesinatos y trampas.
La trama va saltando desde los hechos actuales, en 2017, a los de veinte años atrás, en 1997, cuando está la raíz de todo. Así, veremos a la mayoría de los personajes en pasado y presente -a lo Dark-, lo que para algunos críticos resultó un poco confuso en exceso.
Quizás el problema principal con Le Chalet es que parte del misterio se adivina pronto, y que algunos secundarios que dábamos por intrascendentes son finalmente importantes. Pero la historia corre rápida, son pocos capítulos y es muy entretenida de seguir, esperando ver quién es el siguiente en la lista del asesino. El éxito de público ha sido tal, que incluso se habla de una segunda posible temporada.