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La importancia de Lando Calrissian

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POR Isabel Plant |

El personaje de Star Wars, que regresa a la pantalla en la película Solo, no es simplemente el más cool de la galaxia.

Cuando Lando Calrissian recibió a Han Solo, Leia, Chewbacca  y C3PO en la pista de aterrizaje de Cloud City -la ciudad flotante de la colonia minera en el planeta Bespin-, marcó un hito en el cine de ciencia ficción. El personaje, interpretado con encanto casi sobrehumano por Billy Dee Williams, era descrito por su viejo amigo Han como un “jugador, apostador y sinvergüenza”. Y entonces aparece vestido con capa y seguido por su guardias, para bromear con Solo y Chewi y coquetear con Leia. Hasta entonces la galaxia, muy, muy lejana introducida por George Lucas en la película anterior, era multicultural solo entre razas humanas y extraterrestres, ya que todos sus personajes eran blancos. Aquí había un afroamericano que tomaría protagonismo, sería el ídolo de miles por el encanto del rol, y era un líder, no un seguidor.

Hoy Donald Glover encarna a la versión juvenil de Lando en Solo: una historia de Star Wars, otro spin-off de la saga lanzado tras la unión de Lucasfilm con Disney. El actor y músico es quizás uno de los más aplaudidos hoy, y es uno de los puntos más fuertes de esta precuela sobre bribones espaciales. Él mismo creció jugando con una figurita de Lando Calrissian, un personaje que a lo largo de las décadas sólo ha ganado importancia por su importancia en cuanto a representación en el mundo de la ficción.

Cuando Lando Calrissian entró al mundo de los espectadores, la comunidad afroamericana había hecho avances en la pantalla grande. Sidney Poitier había ganado el Oscar en 1964, por ejemplo. Y desde los años 70, el género fílmico de la blaxploitation había colonizado los cines. Los estudios habían descubierto que el público que antes ignoraban, el negro, estaba ávido de ver cine; mientras los blancos se trasladaban a los suburbios, los afroamericanos se instalaban en los epicentros urbanos con el cine como mayor entretención, y querían dejar de verse como los secundarios de la historia. El blaxploitation les permitió ser héroes y protagonistas, pero generalmente con representaciones estereotípicas, como parte del mundo criminal. Shaft, de 1971, es quizás uno de los títulos más famosos.

El mundo de la ciencia ficción corría en paralelo. Star Trek en la televisión había hecho historia en 1968, por ejemplo, al mostrar el primer beso interracial entre un blanco y una afroamericana. Ya que se asume el universo tiene más especies y extraterrestres, las personificaciones en pantalla se volvieron más diversas. Aunque normalmente los negros estaban relegados a personajes secundarios (y de corta vida). Star Wars, por otra parte, siempre fue considerado un hito de representación, ya que por ejemplo Leia era una mujer protagonista y de armas tomar, una princesa con pistolas. Pero si Una Nueva Esperanza se quedaba atrás en cuando a lo racial, El imperio contraataca se transformó en un hito gracias a Lando.

Lando, aunque no protagonista, fue el primer papel protagónico para un afroamericano en una superproducción de ciencia ficción. Y era lejos el personaje más cool. También era complejo: traiciona a Solo con Vader, pero luego entra en conciencia y termina unido a los héroes y a la fuerza rebelde. Lando luego ha sido protagonista de los cómics, libros y de las animaciones del canon de Star Wars (hasta se casa y tiene hijos).

En la nueva entrega Lando es el mismo en ese sentido, un habiloso y tramposo encantador, y el dueño original del Millenium Falcon. Pero los tiempos han cambiado, al igual que Star Wars. En las películas de la saga actuales las mujeres también son Jedi, un mexicano ha sido un protagonista y miembro de los rebeldes, y otro afroamericano ha sido también el héroe principal de una de las cintas (John Boyega como Finn). 

Ahora, las dudas y rumores circulan sobre si Lando ya no será el perfecto compinche, sino que el centro de la historia: si uno de los próximos spin-offs podría simplemente estar centrado en él y su historia de origen. La jefa de Lucasfilm no lo ha confirmado, pero el mismo Donald Glover ha dicho que sería pura diversión volver a interpretar al personaje en su mundo de bribones, ladrones y tipos juegos de cartas.