Por qué el mundo se rinde ante Gustavo Dudamel
El conductor de orquesta más famoso -y más pop- del mundo, vuelve a presentarse en nuestro país. Su historia y su genialidad hoy son casi legendarias.
El título oficial es de director de la Orquesta Filarmónica de Los Angeles, el que ocupa desde 2009. Pero eso quizás no transmite realmente quién es el famoso conductor, el de pelo ruliento y batuta entusiasta, que se ha transformado en una superestrella de la música docta y en un embajador de los clásicos a nuevas generaciones y al mundo del pop.
A los 37 años es una verdaera superestrella de las orquestas, y a veces visitar la ciudad de Los Angeles significa no sólo toparse con carteles hollywoodenses anunciando películas con rostros de estrellas, sino que él también adorna gigantografías; para su debut al mando de la orquesta de la ciudad, adonde ya llegó convertido en un nombre reconocido, fueron más de 18 mil personas. Desde entonces, y viajando por el mundo, Dudamel sólo ha escalado en estrellato: antes de cumplir 30 años ya había sido invitado a dirigir la Filarmónica de Viena y la de Berlín, y también se ha presentado en La Scala de Milán, en Carnegie Hall en Nueva York, en el Teatro Colón de Buenos Aires y en la Ópera Nacional de París. Con sus famosos rizos negros, hoy salpicados de blanco, Dudamel es famoso por sus energéticas presentaciones, en donde su cuerpo entero vibra al ritmo de Beethoven o Mahler.
El factor Venezuela
Dudamel nació en Barquisimeto, Venezuela, en una familia apasionada por la música, incluyendo a su padre que tocaba el trombón y a su madre con don para el canto; el tío, en cambio, ponía el son latino tocando el cuatro. El pequeño Dudamel comenzó aprendiendo música -violín- desde los cuatro años, y luego partió con los estudios de conducción. Ha contado que desde pequeño sentaba a sus juguetes en fila y los dirigía, batuta en mano.
Dudamel es el más famoso alumno de El Sistema, o Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela. Una verdadera institución en su país de origen, fue creada en 1975 por José Antonio Abreu, pensando en entregarles herramientas y oportunidades a los jóvenes del país a través de la música y del dominio de instrumentos. Se les ofrecía clases gratuitas en jóvenes en riesgo social, cerca de cuatro horas al día después del colegio. Ya han pasado por ahí más de 700 mil jóvenes. Dudamel se convirtió en el pupilo destacado de Abreu, quien en 1999, cuando el joven músico tenía sólo 18 años, lo nombró director de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar y de la Orquesta Sinfónica Nacional de la Juventud en Venezuela.
Desde entonces, y sin importar el estrellato que comenzó en los años 2000, Dudamel no ha perdido su interés social. En 2012 lanzó su propia fundación, que sigue con la premisa del poder transformador de la música en jóvenes y sus comunidades. La música, dice, es un derecho humano y un bien común.
Hoy la relación entre Dudamel y su país es tirante: el conductor que fue alguna vez condecorado por el mismísimo Hugo Chávez, criticó el año pasado la situación en su país tras la ola de protestas contra Maduro y llamó a escuchar a la gente. El líder venezolano no sólo lo criticó de vuelta, sino que canceló la gira de la Orquesta Nacional Juvenil con Dudamel a Estados Unidos. Sin embargo, el conductor ha asegurado que sigue en constante contacto con los músicos en Venezuela, a la espera de que su agenda le permita visitarlos y presentarse ahí.
Un conductor pop
La fama de Dudamel ha sobrepasado el mundo de la música clásica, y se ha infiltrado como pocos antes de él en la cultura pop. Ha sido una estrategia consciente, ya que cree que lo docto no debería aislarse de la gente ni ser elitista. Dudamel no sólo ha tocado con músicos como Coldplay o Juan Luis Guerra, sino que ha aparecido en episodios de Plaza Sésamo, compuso la música para la película El libertador (sobre Simón Bolívar) y hasta tiene una serie de TV donde fue la inspiración -y donde hizo un cameo-, llamada Mozart in the jungle, con Gael García Bernal como un entusiasta conductor de orquesta joven. También, a pedido de John Williams, fue el conductor de la música de apertura y cierre en El despertar de la Fuerza de Star Wars.
Regreso a Chile
El jueves 28 de junio a las 20 horas y el viernes 29 de junio a las 18 horas, Gustavo Dudamel se presentará nuevamente en Chile, en CorpArtes (Rosario Norte 660, nivel -2). Ambos conciertos -uno con la presencia de FOJI o las orquesta juveniles- llevan como título “A mi maestro”, y son en homenaje al fallecido José Antonio Abreu.
Información y entradas aquí.