Sopaipillas, chocolate caliente y una buena cinta familiar en Netflix
Una especial recomendación de PAUTA para vacaciones de invierno: la lista de las mejores películas familiares disponibles en Netflix de las décadas de los 80 y 90.
Las vacaciones de invierno ya están aquí. Y pueden, a veces, ser como esas vacaciones de antes, cuando los actuales padres eran niños o adolescentes y pasaban las tardes en familia comiendo sopaipillas o un buen chocolate caliente.
Y qué mejor que esos actuales padres y madres recuerden esa vieja cinta familiar con sus retoños. En la comodidad del hogar.
En PAUTA hemos creado una lista de películas familiares disponibles en Netflix. No se trata de un puñado de películas cualquiera de los últimos años. En vez, hemos seleccionado entretenidas cintas familiares anteriores al año 2000. Se trata de películas que muy probablemente los adultos ya vieron y que los más chicos, seguramente no. Entonces, es la excusa perfecta para pasar una tarde frente a la pantalla en familia, para rememorar o para ver por primera vez.
Querida, Encogí a los Niños
(Honey, I Shrunk the Kids, 1989)
A fines de los ochenta, Disney complementó su exitosa seguidilla de producciones animadas con sus ya clásicas cintas de aventuras familiares de carne y hueso. Por lejos la más exitosa de esa era fue esta cinta, dirigida por Joe Johnston (Jumanji, Jurassic Park III, Capitán América), que se transformó en un mega éxito al recaudar más de 222 millones de dólares alrededor del mundo.
Wayne Szalinski (el siempre divertido Rick Moranis) es un inventor suburbano que crea una máquina para reducir y miniaturizar el tamaño de las cosas. Y claro, accidentalmente, el invento termina reduciendo a sus dos hijos y al hijo del vecino a un tamaño menor a 20 milímetros. La aventura comienza en el jardín de la casa. Dulce, simpática, divertida, entretenida y con su buena dosis de ciencia-ficción. Qué mejor.
Mentiroso, Mentiroso
(Liar Liar, 1996)
Jim Carrey saltó a la fama a mediados de los 90 con películas como Ace Ventura y La Máscara. Durante esos años, el comediante de las morisquetas amasó una saludable seguidilla de éxitos y esta cinta, quizás, se erige como la mejor de esa era, en donde el mentir o contar la verdad es el motor principal de la historia.
Dirigida por Tom Shadyac –el mismo de Ace Ventura–, Carrey encarna a Fletcher Reede, un exitoso abogado divorciado que no tiene empacho para mentirle a todo el mundo, por lo que sea, incluyendo también a su propio hijo, Max, que lo adora. Entonces, cuando un extraño embrujo le impide a Reede mentir, a partir de un deseo de cumpleaños de su hijo, comienzan las risas y el camino a la redención de nuestro héroe con su familia. Ojo con las cómica secuencia poscréditos.
Matilda
(Matilda, 1996)
Danny DeVito dirigió esta comedia familiar basada en la novela homónima escrita por el gran Roald Dahl (Charlie y la Fábrica de Chocolates, El Fantástico Mr. Fox, Los cretinos, Las brujas) en donde una niña de seis años, Matilda (Mara Wilson), de extremadamente alta inteligencia e incluso poderes telequinéticos, debe enfrentar una difícil infancia pues sus padres la ignoran (el mismo DeVito y su mujer, Rhea Perlman, geniales), además de tener que aguantar a la directora del colegio, la opresiva Agatha Trunchbull (Pam Ferris).
La película es una fresca alegoría de crecimiento y superación con toques fantásticos y un ambiente demasiado curioso, como es tradición en las obras de Dahl. Mara Wilson es encantadora como la protagonista y los villanos son lo suficientemente caricaturescos como para no alterar a los más pequeños. Distinta, divertida y con personajes muy entrañables. Para repetir y repetir.
Jumanji
(Jumanji, 1995)
Es cierto que recientemente vimos una especie de remake de esta cinta estrenada originalmente a fines de 1995. Y si bien puede ser discutible, creemos que la idea original, que recaudó más de 263 millones de dólares en su momento, es mucho mejor que la nueva cinta, que tiene a Dwayne “La Roca” Johnson como protagonista y que ya prepara una secuela. El concepto de ambas cintas es esencialmente el mismo, pero la ejecución muestra mucho más corazón en la película original que en la nueva versión.
Dos hermanos, huérfanos tras un accidente donde sus padres perdieron la vida, se mudan a una mansión, donde descubren un curioso juego de mesa llamado Jumanji que comienzan a jugar. Al poco rato, comienzan a aparecer diversos animales salvajes en la casa, hasta que aparece un hombre (Robin Williams) atrapado en el juego desde hace décadas.
Un papá genial
(Big Daddy, 1999)
Mucho antes de que Adam Sandler se transformara en un favorito de Netflix, el exintegrante de Saturday Night Live realizó un puñado de comedias familiares muy emotivas durante la segunda mitad de los 90. La mayoría posee un muy discutible encanto y un humor definitivamente adolescente, pero esta comedia tiene un muy buen balance dramático, ideal para ver en familia con niños.
Sandler encarna a Sonny Koufax, un abogado de 32 años que se rehúsa a crecer y madurar, a pesar de su edad y de su novia. Todo cambia cuando un buen día aparece en su departamento un niño de cinco años, producto de un affaire de su compañero de cuarto (Jon Stewart), para que se haga cargo mientras él no está. Así que aprovecha el encanto del niño para reconquistar a su novia, entre otras cosas, por supuesto. Lo más divertido, claro, es justamente la inmadura relación padre-hijo de ambos. Emotiva, divertida y quizás una de las más honestas cintas de Sandler.
E.T. El Extraterrestre
(E.T., The Extra-terrestrial, 1982)
Esta icónica cinta sigue siendo una experiencia profundamente emocionante. Dirigida por un muy inspirado Steven Spielberg, quien, tras el éxito de Encuentros Cercanos del tercer Tipo, quiso seguir explorando la idea de que la vida extraterrestre podía no sólo ser benigna, sino que derechamente podía estar emparentada con la vida de un niño preadolescente, a partir de las propias vivencias del director cuando se sentía como un “extraterrestre” en su entorno.
La cinta cuenta la historia de un alienígena varado en nuestro planeta y los esfuerzos de Elliot (Henry Thomas) de ayudarlo a volver a su planeta, mientras tratan de esconderlo de oscuros agentes gubernamentales. El resultado es una cinta de ciencia ficción, de aventuras y un drama familiar que garantiza emocionar a grandes y chicos con sus últimas escenas.
Volver al Futuro
(Back to the Future, 1985)
Sin duda una de las cintas de aventuras y ciencia ficción más efectivas de los años 80, el impacto sociocultural de esta trilogía producida, entre otros, por Steven Spielberg y dirigida con mucha creatividad por el gran Robert Zemeckis, Volver al Futuro siegue erigiéndose como una muy entretenida cinta familiar de viajes en el tiempo que envejece de muy buena gana.
Michael J. Fox es Marty McFly, el joven de la parka sin mangas que, sin querer, termina viajando en un DeLorean de 1985 a 1955. Ahí, en medio de la inocencia norteamericana de esos años, nuestro héroe no solo deberá volver a su presente, sino que también lograr que sus padres se enamoren. De lo contrario, será borrado de su existencia. El ideal sería ver la trilogía completa, de un tirón.