Desánimo, aumento del apetito, irritabilidad son algunos de los síntomas de la depresión estacional o trastorno afectivo estacional que se registra durante los meses de otoño e invierno y se relaciona con la disminución de la luz, entre otros factores. Sobre el tema, Carolina de Moras y Nacho Lira conversaron con Ximena Rojas, psicóloga y académica de la Universidad San Sebastián.