Los chilenos a la cabeza del Global Methane Hub: una iniciativa mundial para reducir las emisiones de metano
En Clima de Cambio conversamos con Marcelo Mena, CEO de Global Methane Hub y con Carolina Urmeneta, directora de Economía Circular para las Américas de la misma institución, sobre el trabajo que se ha levantado para reducir la emisión este tipo de gases.
Gases, fugas, flatulencias y peos, son las emisiones de metano provocadas por la ganadería, y que en el proceso de digestión de los alimentos, especialmente de las vacas, se produce y libera este gas altamente contaminante para el medioambiente.
Mientras que el CO2 permanece en la atmósfera por cientos a miles de años, el metano se descompone en menos de 20 años. Pero si uno toma el poder de calentamiento global de este gas en esos 20 años, es de 86 veces el CO2. Por lo tanto, reducir estas emisiones ahora tendría un impacto potente a corto plazo en el ámbito local y también global.
Es por esto que dos chilenos han estado liderando la carrera a nivel mundial. El Global Methane Hub, con Marcelo Mena como CEO, trabaja a través de un financiamiento de aproximadamente 300 millones de dólares. Este fondo ha destinado recursos a proyectos que buscan frenar las fugas de metano en la industria de hidrocarburos y mejorar las prácticas agrícolas y ganaderas, principales fuentes de emisiones de metano.
“Tenemos esta iniciativa de 200 millones de dólares dedicados a la investigación de bajar las emisiones de la ganadería. Cómo poder generar distintos tipos de suplementos alimenticios que vayan inhibiendo la generación de metano en el rumen, también modificar la genética de las bacterias o cómo podemos desarrollar vacunas que permitan que un animal no genere metano”, comenta el experto.
La economía circular es clave para reducir las emisiones de metano
Ocho de los países más altos en emisiones de metano en el sector agrícola son de ingresos medios y bajos. Chile fue el primer país latinoamericano en establecer la meta de la carbononeutralidad al 2050 y la resiliencia climática legalmente. Sin embargo, Carolina Urmeneta, explica que el problema en nuestro país es grave y que sin una buena gestión de residuos es difícil cumplir con las metas propuestas.
“No tenemos territorios ni tenemos comunidades que quieran aceptar nuevos rellenos sanitarios. Y además, muchos en vez de estar terminando su vida útil se están incendiando. Son una bomba, entonces tienes un problema que es tremendo, que hay que solucionar con una visión de economía circular”, afirma.
Según Carolina Urmeneta, lo primero es dejar de desperdiciar tanto alimento, lo que tiene que ver con las cadenas productivas “seamos mucho más eficientes, perdamos menos alimento en nuestras casas. Este es un problema muy ciudadano”, agrega.
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