Moranbong Band: pop coreano a la medida del Líder Supremo
El grupo femenino es la respuesta de Kim Jong-Un al éxito de la música kpop de sus vecinos surcoreanos. ¿Qué dicen sus canciones?
Y el coro de la canción dice: “Nuestra felicidad, camarada Kim Jong-Un; nuestra gloria, camarada Kim Jong-Un; La gente vivirá por siempre bajo su cuidado; nuestro camarada Kim Jong-Un”. Las intérpretes de la “pegajosa” tonada llamada “Es nuestro camarada” son una decena de mujeres, ataviadas en vestidos cortos y de inspiración militar, que tocan la guitarra, la batería y más. Hacen coreografías al ritmo de su música. Es Moranbong Band, el grupo femenino de pop más famoso -y el único permitido prácticamente- en Corea del Norte. Otros de sus hits incluyen las canciones “Himno del socialismo avanzado”, “Mi país es el mejor” y “Sólo te seguiremos a ti”.
Moranbong se ha convertido en un símbolo de propaganda para el líder norcoreano y un vehículo de promoción en los nuevos tiempos. Si bajo el liderazgo de Kim Jong-Il, y desde la creación de Corea del Norte, la música permitida iba más por las orquestas clásicas mezcladas con instrumentos y sonidos tradicionales del país, el heredero tuvo que reaccionar frente al impacto mundial del pop proveniente de Corea del Sur (conocido como K-pop). Así, agrupaciones que vivieron épocas de gloria y dominación en las ceremonias oficiales como la Orquesta Unhasu, han sido reemplazadas por Moranbong y lo que podríamos llamar NK-pop.
El grupo femenino fue creado en 2012, el mismo año en que el “Gangnam Style” surcoreano se convirtió en un hit mundial. Según reportes citados por medios como The Guardian o Time, las integrantes de Moranbong Band fueron escogidas directamente por Kim Jong-Un. Él mismo ha sido visto en sus conciertos coreando las canciones -que principalmente hablan de lo fantástico que es-, y por ejemplo, son Morabong las convocadas a festejar logros del país, como su show en la cena en honor al exitoso lanzamiento de un cohete en 2016. Moranbong band también fue el número estelar cuando Norcorea recibió a una delegación cubana en 2015. Pero su primera gira internacional se vio frustrada ese mismo año, cuando China, donde tenían agendados tres conciertos, decidió cancelar las presentaciones. Sobre la razón final hay diferentes versiones, recogidas en medios surcoreanos y otras que rondaron por redes sociales chinas. Se dijo desde que había “mensajes antinorteamericanos” en el show (hay canciones sobre el poderío de las armas norcoreanas), lo que podría haber llevado a un conflicto internacional, o también según replicaron algunos medios por la relación de Kim Jong-Un con una de las miembros de la banda.
La creación de Moranbong fue recibida por entusiasmo en el país, donde según un reportaje al respecto de Foreign Policy, sus presentaciones son coreadas y recibidas con ovaciones (lideradas, claro, por el líder norcoreano). Todos los análisis coinciden en que es un símbolo de apertura occidental: las miembros de la banda usan faldas cortas, peinados a la moda y un look que nada tiene que ver con la estricta imagen que hasta hace unos años parecía representar al país. Su cancionero, además de las tonadas en homenaje al líder y al régimen, han incluido también interpretaciones “My Way”, de Frank Sinatra, “Eye of the tiger”, parte de la banda sonora de Rocky, y la canción de Winnie the Pooh.
Por supuesto que tratándose del amado líder, la existencia de Moranbong Band no ha estado libre de intrigas, y estas giran alrededor de su miembro más importante, Hyon Song-Wol. Según medios surcoreanos como The Chosun Ilbo, y replicado luego por medios británicos y norteamericanos, la cantante habría sido amante de Kim Jong-Un. Luego se especuló que había sido ejecutada por el régimen por supuestamente estar implicada con un grupo de músicos en videos pornográficos, pero Hyon Song-Wol reemergió en la luz pública. No sólo eso, sino que es una embajadora clave en misiones diplomáticas: en los últimos intercambios entre las dos Coreas, como la inspección de las instalaciones para los Juegos Olímpicos, Hyon Song-Wol ha sido parte de la delegación oficial de su país, acaparando flashes y miradas, así como reportes sobre su vestimenta como si fuera una estrella de Hollywood. La cantante además es parte del poderoso Comité Central del Partido de los Trabajadores, y también tiene un rango importante en el Ejército del Norte.
Mientras Norcorea ha mandado a esta embajadora pop a reuniones a Corea del Sur, Pyonyang recibió este año a la primera delegación de artistas que los visita desde el país vecino desde 2005. Y entre el centenar de artistas que fueron recibidos como parte del avance diplomático entre ambos países estaba el grupo sensación de K-pop femenino Red Velvet. Son tan exitosas, que hasta el mismísimo Kim Jong-Un apareció sorpresivamente en su concierto -bloqueando la cobertura de prensa-, y asegurando que reorganizó su agenda para poder verlas y que estaba conmovido por la música. Quizás el K-pop, hasta hace poco prohibido por el régimen norcoreano, sea finalmente el mejor vehículo de unión entre ambos países.