La ansiedad por las reformas en el Brasil de Bolsonaro

Jair Bolsonaro cumple 100 días en el gobierno con su aprobación a la baja y sin lograr sacar adelante su reforma emblemática: la del sistema de pensiones.

Jair Bolsonaro cumple 100 días en la presidencia de Brasil, con un Congreso sin una mayoría clara y con alta dispersión de partidos, lo que le ha hecho difícil avanzar en las reformas que fueron la base de su campaña, especialmente la del sistema de pensiones, que tiene al Estado con un importante déficit fiscal.

Además, la aprobación del presidente Bolsonaro se ha derrumbado. Hoy, la opinión pública se divide prácticamente en tercios entre quienes califican su gestión como buena o excelente; regular, y mala o pésima, según una encuesta realizada por Atlas Político.

“Yo diría que, después de 100 días, los resultados han sido mixtos”, afirma desde Sao Paulo el editor gerente de Bloomberg para América Latina, Dan Cancel, quien explica que sus dos máximos apoyos, los grupos proempresa y los círculos más conservadores, han obtenido de Bolsonaro algunos gestos, y destaca la coexistencia de estas facciones al interior del gobierno. “Entre ellos se ve que hay tensiones y no están todos nadando en la misma dirección siempre”, comenta.

Bolsonaro no gobierna con una mayoría de parlamentarios de su partido, el Social Liberal, en el Congreso. En la Cámara de Diputados, el Partido Social Liberal solo cuenta con 52 de los 513 puestos. Sin embargo, un estudio de enero de este año proyectó que tendría un respaldo parlamentario mayoritario en esa cámara -superior al que tenía, por ejemplo, Lula da Silva cuando asumió la presidencia del país.

Aprobación de Bolsonaro

Respecto de la baja en la aprobación de Bolsonaro, en conversación con PAUTA Bloomberg Cancel destaca que era algo esperable. “Era natural que del 70% o 65% con que arrancó en diciembre iba a caer”, dice, aunque destaca la baja pronunciada que ha tenido en el último mes. “No se ha visto mucha medida concreta para mejorar la economía. Hay expectativas sobre las reformas, pero se ve que pasa mucho tiempo peleando por redes sociales. Ha tenido peleas abiertas con diputados en el congreso, y eso no está ayudando mucho a mandar señales de confianza para el mercado”, explica sobre las razones de esta baja.

Uno de los grandes retos que enfrenta el presidente de Brasil es sacar adelante las reformas, en especial la de pensiones. “Para el mercado, lo único que importa este año es que haya reformas”, señala Cancel. “El problema es que todavía la articulación en el congreso no se ha dado muy bien […] y eso obviamente está complicando que se avance en el programa”, agrega.

El rol de Guedes

El papel del ministro de Economía, Paulo Guedes, está en el centro de las preocupaciones de los economistas que desean las reformas.

“Guedes hasta ahora está haciendo lo que dijo que iba a hacer, que es empujar privatizaciones, buscar vender activos del Estado, reducir el tamaño del Estado”, dice Cancel. “Él se puso enfrente del congreso ahora para tratar de explicar la propuesta de las pensiones […] Yo creo que el mercado sigue teniendo a Guedes como su principal figura de esperanza”, agrega. “Cualquier señal de que podría irse Guedes del gobierno sería un desastre”, sentencia.

Reacciones del mercado

“Todo el mundo está viendo la reforma de pensiones. Con aprobar eso a mitad de año, en el tercer trimestre, incluso a final de año, creo que sí va a haber otro rally de los activos”, manifiesta Cancel. “Hay factores externos obviamente, de los otros mercados emergentes, pero para otro rally solamente basado en fuerzas domésticas, eso va a venir con la reforma, y eso va a tardar”, asegura.

Con todos estos antecedentes, el Fondo Monetario Internacional (FMI), en su informe de perspectivas de la economía mundial de abril, rebajó las expectativas de crecimiento de Brasil para 2019 en cuatro décimas, a 2,1%. Para 2020, el FMI ajustó al alza la previsión, del 2,2% proyectado en enero a un 2,5% ahora en abril. De todos modos, esta proyección está alineada con las expectativas del informe para la economía mundial, que según el FMI crecerá 3,3% este año.

Escuche la conversación completa en PAUTA Bloomberg acá: