La forma del agua para el futuro de países y ciudades

Mientras algunos países están al borde de la desaparición por el alza del nivel del mar, el agua puede ayudar a la sobrevivencia de ciertas ciudades “esponja”.

La Tierra contiene aproximadamente 1.386 millones de kilómetros cúbicos de agua, pero solamente el 2,5% de ella es dulce. Es un bien sumamente preciado por todo ser vivo, cuyo balance podría jugar un rol fundamental en el futuro de las ciudades. Su exceso podría llevar al hundimiento de islas y pérdida de territorios, y su escasez podría provocar grandes conflictos humanos y ser señero respecto del delicado equilibrio al que nos enfrentamos con el cambio climático.

Desaparecer entre los mares

“En comparación con el comienzo de la era industrial, nos encontramos actualmente con un 50% más de agua de deshielo”, señala un artículo de la revista National Geographic de marzo de 2019.

El 10 de mayo la BBC informó que, debido al aumento en el nivel del mar por el calentamiento global, a unos 1.500 kilómetros de Australia en el archipiélago de Salomón se hundieron cinco islas en las cuales vivían aproximadamente 650.000 personas. Otras seis islas del archipiélago se encontrarían en un riesgo similar, e incluso en dos de ellas ya se reubicó a los habitantes debido a los daños y peligros que corren a causa del agua.

Situaciones como esta se han vuelto un foco de preocupación para las autoridades, por lo que incluso la COP 25, que se realizará en Chile en diciembre, tiene entre sus temas por tratar las “islas Estado”, es decir, aquellos países que, debido a su condición de islas, en caso de que aumente el nivel del mar corren el riesgo de desaparecer.

En Chile existen más de 2.000 islotes —territorios de entre tres y nueve hectáreas— y cerca de 3.800 islas. “En general la zona sur, debido al desmembramiento del continente, nos lleva a tener una gran superficie de islas”, explica Kay Bergamini, geógrafo e investigador del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales UC, en Voces de la Gran Ciudad.

Ya que debido al derretimiento de los polos se prevé que en el año 2100 el mar se alce en aproximadamente medio metro, el investigador señala que una de las estrategias más recomendables “es identificar en las ciudades o zonas costeras dónde se encuentran aquellas obras o infraestructura más sensible de verse afectada. Ahí se pueden implementar medidas más ingenieriles, como barreras o rompeolas, que nos permitan disminuir la potencia de esta afectación”.

Revise la entrevista completa con Kay Bergamini en Voces de la Gran Ciudad:

Absorber agua para reverdecer la ciudad

Según el Ministerio del Medio Ambiente, los humedales son ecosistemas acuáticos que sostienen la biodiversidad y que nos proveen importantes elementos para la vida.

Por este motivo, desde el Centro de Humedales del Río Cruces, de la Universidad Austral de Chile, aseguran que tanto los humedales naturales como los artificiales podrían ser “esponjas” capaces de absorber una gran cantidad de agua y purificarla. Han propuesto su desarrollo y preservación como una alternativa para mitigar los efectos de la crisis climática, de modo que las ciudades pasen de ser grises a “esponjas”: que puedan absorber el agua de las lluvias y la vayan liberando lentamente en tiempos de sequía.

Para esto, y según cuenta el director del Centro de Humedales, Ignacio Rodríguez, es necesario aplicar una serie de acciones y planificación urbana que considere principalmente infraestructura verde y conservación de los espacios naturales que ya existen, como bosques y humedales. “Pero también se debe tener en cuenta la ingeniería civil para hacer jardines de agua, pavimientos permeables y techos verdes. La mezcla de estas tecnologías puede ayudar a que se absorba el agua en estos momentos de gran cantidad de lluvia y aprovecharla cuando hace falta”, explica Rodríguez.

Revise la entrevista completa con Ignacio Rodríguez en Voces de la Gran Ciudad: