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Cómo entender el informe de la ONU que acusa a Maduro de crímenes de lesa humanidad

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Bloomberg
POR Eduardo Olivares |

La misión especial del Consejo de DD. HH. para Venezuela denuncia detenciones arbitrarias, ejecuciones extrajudiciales y torturas sexuales.

Una misión especial ordenada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, integrada por tres comisionados -entre ellos el chileno Francisco Cox-, determinó que hubo una serie de atropellos a los derechos fundamentales en Venezuela al menos desde 2014. El informe es uno de los más graves que la comunidad internacional ha despachado sobre aquel país, pues acusa al gobernante venezolano, Nicolás Maduro, y a una serie de autoridades de haber ejercido acciones criminales.

“La misión encontró motivos razonables para creer que las autoridades y las fuerzas de seguridad venezolanas han planificado y ejecutado desde 2014 graves violaciones a los derechos humanos, algunas de las cuales – incluidas las ejecuciones arbitrarias y el uso sistemático de la tortura – constituyen crímenes de lesa humanidad”, planteó la presidenta de la misión, Marta Valiñas.

“Los organismos de inteligencia también sometieron a la disidencia –tanto hombres como mujeres– a violencia sexual”, agrega el documento.

Puede leer el informe AQUÍ.

Para el resumen y el impacto del documento, revise la conversación con el editor general de PAUTA, Eduardo Olivares, en Pauta Final:

Asimismo, el analista internacional John Müller comentó en Primera Pauta, de Radio PAUTA con respecto a este informe que “los hallazgos son tenebrosos. Señala que hay tres personas en Venezuela, Nicolás Maduro, Néstor Reverol y Vladimir Padrino, responsables de los servicios de policía política del país que habrían dado ordenes para cometer delitos de lesa humanidad contra la población venezolana. […] con este informe los juristas piden a distintas personas, organismos y países que apelen a la Corte Penal Internacional (CPI) y lleven denuncias contra estos personajes. A mi me parece un informe muy contundente”.

Revise el comentario internacional de John Müller en Primera Pauta: