Tras ataque terrorista, Austria encabeza la lucha de Europa contra el Islam radical
“Es una lucha entre los muchos que creen en la paz y los pocos que buscan la guerra, una lucha entre la civilización y la barbarie”, manifestó el canciller austriaco, Sebastian Kurz.
Los disparos de un partidario del Estado Islámico, que mató al menos a cuatro personas, se produjeron el lunes tarde, en la última noche antes de que el país entrara en su segundo confinamiento para contener la rápida propagación del coronavirus.
El ataque terrorista más mortal que haya vivido Austria obligará a Kurz a volver al tema que apuntaló su ascenso al poder, justo cuando estaba bajo presión por su manejo de la pandemia. Pero ahora, hay más en juego que una elección.
“Lucha entre la civilización y la barbarie”
“Esta no es una lucha entre cristianos y musulmanes, o entre austriacos y migrantes”, dijo Kurz en un discurso televisado a la nación, que iniciará un período de duelo de tres días. “Es una lucha entre los muchos que creen en la paz y los pocos que buscan la guerra, una lucha entre la civilización y la barbarie”.
El ataque sigue a un aumento en la violencia supuestamente islamista en Francia, donde el presidente Emmanuel Macron ha enmarcado los asesinatos como un ataque a los valores occidentales. Al igual que Macron, Kurz adoptó una línea dura, advirtiendo de los riesgos de inmigración y los peligros del extremismo islámico.
Pero, dado que los europeos ya se han visto sacudidos por la crisis del coronavirus y debido a la preocupación de que la pandemia afecte más a algunas minorías, el mandatario ahora se enfrenta a un desafío para formular una respuesta que no avive las llamas.
El tirador, abatido por la Policía durante el ataque, era un ciudadano austriaco y macedonio del norte de 20 años nacido y criado en Austria, según el Ministerio del Interior y, antes del ataque, publicó en Instagram imágenes de sí mismo con armas y un machete.
En abril de 2019, el perpetrador, que la Policía conocía por sus simpatías por el Estado Islámico, fue sentenciado a 22 meses de cárcel por intentar viajar a Siria y unirse al grupo extremista, pero fue liberado en diciembre. No está claro cómo logró acceder a armas de fuego y planear el ataque sin intervención policial.
Macron tuiteó su apoyo a Austria poco después de las primeras informaciones. “Esta es nuestra Europa”, dijo Macron en Twitter. “Nuestros enemigos deben saber con quién están tratando. No cederemos”.
Enemigo conjunto
La canciller alemana, Angela Merkel, también envió un mensaje de apoyo, diciendo en un comunicado que el terror islámico es “nuestro enemigo conjunto” y que “la lucha contra estos asesinos es nuestra batalla conjunta”.
Hasta ahora, Austria se había librado de grandes ataques terroristas como los que han afectado a Francia, España y Alemania en las últimas décadas. El ataque de Carlos el Chacal contra la sede de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en Viena en 1975 dejó tres muertos.
El ministro del Interior austríaco, Karl Nehammer, dijo que el martes por la mañana se allanaron varias direcciones y que las personas vinculadas al tirador fueron detenidas, aunque aún no estaba claro si actuó solo.
“Defenderemos nuestros valores, nuestra forma de vida y nuestra democracia”, dijo Kurz. “Capturaremos a los perpetradores, sus patrocinadores y sus partidarios, y los llevaremos ante la Justicia”.