¿Cuánto kilos se pueden subir en el fin de semana de Fiestas Patrias?

La respuesta no va solo en qué se come, sino cómo y cuándo se come. Los especialistas recomiendan no saltarse las tres comidas diarias y tener mucho cuidado con las bebidas alcohólicas y azucaradas.

En plena celebración del 18 de septiembre, la gran preocupación de muchos se remite a qué tendrá la parrilla. Y a partir del domingo en la tarde, cuál es el saldo de kilos de más que se subieron en estas Fiestas Patrias. ¿Cuánto peso se puede ganar en estos días? Esa fue la pregunta que recibimos esta semana y por esa razón, el Contestadog, de WatchDog PAUTA, habló con varios expertos en nutrición para saber de qué manera se puede lograr una alimentación equilibrada durante este fin de semana largo.

Entre dos a cuatro kilos…

Son varios los factores que se combinan durante estas celebraciones y que repercuten en el aumento de peso. El principal es el alto contenido calórico que tienen las comidas típicas de estas fechas, como las empanadas, choripanes y bebidas alcohólicas.

Rinat Ratner, nutricionista de la Clínica Alemana y directora de Nutrición y Dietética de la Universidad del Desarrollo (UDD), explica que la ingesta de varios de estos platos en estas estas fechas -como la carne, los choripanes o las empanadas- hace que consumamos cerca de 4 mil calorías diarias, duplicando lo que requerimos. “Esto conlleva a una ganancia de peso de alrededor de 2 a 3 kilos, que es lo que habitualmente se gana en Fiestas Patrias”, complementa la especialista.

¿Cuántas calorías tienen los principales platos típicos?

Empanada de horno: 600 kcal
Empanada frita de carne (100 g): 347 kcal
Choripán (sólo marraqueta con longaniza): 339 kcal
Carne magra (250 g): 175 kcal
Anticuchos (carne, pollo, verduras): 255 kcal
Pollo (200 g): 240 kcal – Cerdo (200 g): 560 kcal
Cordero (200 g): 520 kcal
Longaniza (150 g): 582 kcal
Ensalada chilena (126 g): 76 kcal
Ensalada de lechuga (50 g): 31 kcal
Papas con mayonesa (170 g): 273 kcal
Mote con huesillo (con azúcar): 330 kcal
1 copa vino tinto: 70 kcal
1 vaso chicha: 50 kcal

Por todo esto es que los expertos recomiendan mantenerse activos durante estos días. Salir a caminar, participar de juegos tradicionales, como tirar la cuerda, las carreras de saco y más de alguna “patita de cueca”. Actividades que involucran un gasto energético y que contribuyen a disminuir las calorías consumidas.

Otra de las variables que afecta en el peso es la manera en la que se distribuyen las comidas. Según Ximena Martínez, nutricionista del Centro del Tratamiento de la Obesidad de la Red UC-Christus, las personas tienden a saltarse algunas comidas esperando el asado del almuerzo o de media tarde. Martínez explica que a la espera de una comida más copiosa, como se está con un gasto energético más bajo, el cuerpo almacena y guarda. “Y eso va a favorecer el aumento de peso”, explica. Esto podría traducirse en tres o cuatro kilos de más. Por eso la recomendación es respetar los horarios de alimentación.

“El estrés fisiológico y el estrés psicológico pueden predisponer a una mayor ganancia de peso”, agrega María José Escaffi, nutrióloga jefe del Departamento de Nutrición y Vida Saludable de la Clínica Las Condes. Respecto del estrés fisiológico, este puede ocurrir cuando se altera el sueño, ya que no se respetan los ciclos circadianos. Durante ellos “aumentan unas hormonas llamadas orexinas que dan más hambre, y si hay problemas de sueño a largo plazo, puede haber un trastorno incluso del eje hipotalámico-pituitario-adrenal (HPAI), lo que dispone a tener mayor adiposidad; es decir, acumulación de grasa en el cuerpo”, dice Escaffi.

¿Cómo celebrar un 18 más saludable?

Son varias las recomendaciones para celebrar estas fechas de manera equilibrada y poder disfrutar sin preocuparse por contar las calorías. Las tres especialistas coinciden que en estas fiestas la alimentación no se debe restringir hasta el punto de no disfrutar los platos.

Como primer consejo: hay que mantener las tres comidas que corresponden al día, junto con dos colaciones. Es fundamental no llegar con tanto apetito a la hora del asado familiar. “No saltarse las comidas es un punto súper importante”, asegura Martínez.

¿Y al momento del asado? Es preferible optar por carnes magras, e incluir en la parrilla verduras como “berenjenas, zapallitos italianos, cebollas, cebollines, pimentones, de manera de tener también un aporte de alimentos que sacian el hambre y con muy bajo aporte calórico”, dice Ratner.

Lo otro relevante es controlar el consumo de bebidas alcohólicas y azucaradas. “Un gramo de alcohol son siete gramos de calorías vacías. Por lo tanto, hay que evitar los alcoholes con las preparaciones y el licor dulce, todo lo que sea dulce con azúcar, especialmente el pisco sour y el terremoto”, explica Martínez. Por eso, el vino, los espumantes o las cervezas son mejores opciones, en la medida que sea con moderación. En cuanto a las bebidas de fantasía, es mejor elegir las que sean light, aunque siempre será mejor tomar agua.

En el caso de los postres, lo ideal es que sean frutas. Y en el caso del mote con huesillo, se debe preferir “algún tipo de endulzante, de manera de ahorrarnos las calorías del azúcar que puede tener este tradicional postre”, propone Ratner.

WatchDog PAUTA es un proyecto de fact-checking conjunto entre la Facultad de Comunicación de la Universidad de los Andes y PAUTA. Busca tomar temas en la agenda y rastrear su veracidad desde una perspectiva positiva, no inquisitoria.

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