¿Es cierto que los jóvenes votan menos?
En las últimas elecciones había menos participación de jóvenes. Esta tendencia se revirtió en el plebiscito de 2020. ¿Qué sucederá este 21 de noviembre?
Este domingo 21 de noviembre los chilenos acudirán a las urnas para elegir Presidente, diputados, senadores y consejeros regionales. Y tal como ocurre en cada elección, una de las preguntas es cuántas personas ejercerán su derecho a voto.
Por eso, nuestro Perro de Caza del Watchdog PAUTA, esta vez quiso indagar una de las afirmaciones que ha escuchado en más de una ocasión durante este periodo: que los jóvenes votan menos que otras generaciones.
Y, ¿votan menos?
Un elemento importante para responder a esta pregunta es establecer entre qué grupo etario se denomina a un votante como joven. Eugenio Guzmán, decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, explica que “es una cosa más bien relativa, que no tiene una respuesta única. Pero, lo que uno normalmente utiliza, comprende el período en el que las personas recién se están integrando al mundo del trabajo o bien se encuentran estudiando, lo que puede extenderse entre los 18 a los 30 años”.
Respecto a la tendencia en general, este grupo ha demostrado una menor participación. A través de un análisis etario de las tres últimas elecciones previas al plebiscito de 2020, disponible en el sitio del Servel, se da cuenta que es a partir de los 60 años, donde se registra una alta participación electoral.
Para la elección presidencial, parlamentarias y de consejeros regionales de 2013, el segmento etario con mayor participación fue el rango entre los 65 y los 69 años de edad (69,16%) y el menor aquel entre 18 y 19 años (29,43%). En el caso de las elecciones municipales de 2016, nuevamente el grupo entre 65 y 69 años fue el que más votó (52,71%) y los jóvenes de entre 20 y 24 años, los que menos (21,10%).
Finalmente, en las primarias de 2017 los que más votaron fueron los de 65 y 69 (20,04%) y los que menos los de 80 años o más (9,58%), seguidos por el rango entre 20 y 24 años (10,57%).
“Si analizas por corte de edad, entre los 18 y 30 años, puedes ver efectivamente que los jóvenes votan menos. Sin embargo, en el plebiscito del año pasado hubo un cambio en donde creció de forma significativa la votación y bajó la de los mayores de 60 años”, explica Guzmán.
Pero en el plebiscito de 2020, los que más votaron fueron los jóvenes de entre 20 y 24 años con 56,99% de sufragio. El rango que menos votó fue el de 80 años o más (18,98%). Por eso, Guzmán señala que “la verdad es que no sabemos si en está elección qué va a ocurrir finalmente, lo más probable es que esa gente que ya votó una vez pueda hacerlo nuevamente”.
Aquello es concordante con el análisis del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales UC “Quiénes votan en Chile“, que estudió el comportamiento de 400 mil votantes que participaron en procesos municipales y presidenciales entre 2012 y 2017, concluyendo que a mayor participación en elecciones anteriores aumenta la probabilidad de participar en una elección futura.
Con respecto a las votaciones antes del plebiscito, Marta Lagos, fundadora de Latinobarómetro y MORI Chile, explica que la tendencia de baja participación electoral de los jóvenes en Chile ha ocurrido a partir del año 2012 en adelante, desde que se implementó el voto voluntario.
“Existe un votante ocasional que es -más o menos- el 50 o 60% de la población que vota a veces. Y ese ‘a veces’ está determinado por los candidatos, por el tipo de campaña, por la competitividad de la campaña, por el riesgo que se corre”, asegura Lagos.
En ese sentido, propuestas como permitir que los jóvenes tengan derecho a sufragio desde los 16 años, a juicio de los expertos, no contribuiría a incentivar la participación. “Lo que debemos hacer es mejorar los mecanismos para facilitar que las personas vayan a votar”, asegura Guzmán. Mientras que Lagos, considera esta medida como “populismo total, no sirve para nada, porque esos jóvenes no van a votar nunca antes de los 20, 25 o 30 años”, dice Lagos.
Acerca de las motivaciones para votar, estas también pueden ser muy variadas y responder a distintas razones, entre las que se encuentran, el sentimiento de pertenencia a una comunidad, el llamado a defender ciertas ideas e incluso el compromiso por cumplir con una responsabilidad cívica.
De acuerdo con el estudio Diagnóstico Sobre la Participación Electoral en Chile del PNUD, basado en datos de la Encuesta Auditoría a la Democracia de 2016, para las elecciones presidenciales de 2013 el principal motivo para no votar es el desinterés en la política.
Esto se repite en todos los niveles socioeconómicos, pero en especial en el más bajo (46%), en el caso del nivel socioeconómico alto, se reitera también la respuesta “porque me dio lata ir a votar” (27%).
El informe señala que solo el 29% de quienes tienen menos de 35 años califica como “muy importante” votar siempre en las elecciones, en comparación con casi el 50% de quienes tienen 55 o más años.
Además, el estudio también utiliza datos de la Encuesta Nacional INJUV 2015 y concluye que la participación en manifestaciones de tipo político no tradicionales, como marchas o tomas, influye en el comportamiento electoral de los jóvenes. En este sentido, 56,7% de quienes fueron parte de este tipo de actividades, concurrieron a votar. Mientras, sólo 36,4% de quienes no lo hicieron, sufragaron.
“En las sociedades más fracturadas, como es el caso de la nuestra, donde la mitad de la gente no vota, no lo hace no solo por una edad determinada, sino porque hay una porción de la sociedad que no está incluida y que no se siente parte del país”, asegura Lagos.
¿Votarán más jóvenes este 21 de noviembre?
De acuerdo a los expertos, es difícil determinar qué es lo que podría ocurrir este domingo en las elecciones. Para Guzmán, en estas votaciones se podría continuar una participación cercana a la del año pasado, siempre que se mantengan algunos factores como la polarización.
Con respecto al ambiente electoral, Lagos asegura que en la campaña actual hay una menor movilización, una disminución en la percepción de competencia y lejanía hacia la política, lo que podría abrir la posibilidad de una elección con menor convocatoria.
A pesar de que los candidatos en esta oportunidad son más jóvenes, no es posible esperar que los votantes reflejen lo mismo. “No existe el voto etario, sino que el voto valórico, es decir, el centrado en la persona. No ocurre una solidaridad generacional, muy por el contrario, en política lo que vale es el conjunto de la persona mucho más allá de su edad”, explica la fundadora de Latinobarómetro y MORI Chile.
WatchDog PAUTA es un proyecto de fact-checking conjunto entre la Facultad de Comunicación de la Universidad de los Andes y PAUTA. Busca tomar temas en la agenda y rastrear su veracidad desde una perspectiva positiva, no inquisitoria.
La sección Perro de Caza aborda mitos generalizados que se comentan de boca en boca.