El Mundo por Delante: Kim Jong-Un cumple una década gobernando Corea del Norte

Tras la muerte de Kim Jong-Il, su hijo tomó el poder con 27 años. Desde entonces ha acaparado la atención mundial. Alberto Rojas describe todo en dos minutos.

Hace 10 años, en diciembre de 2011, la muerte de Kim Jong-Il, quien había gobernado Corea del Norte durante 17 años, cerró un capítulo en la historia de este hermético país asiático. Pero también marcó el inicio de una nueva etapa, cuando su hijo Kim Jong-Un, de solo 27 años, asumió como líder supremo de Norcorea.

De esta forma, Kim cumple ahora una década en el poder, la que ha estado llena de episodios que han tensionado la relación con la comunidad internacional.

Por ejemplo, en diciembre de 2013 destituyó y ordenó la ejecución de su tío político, Jang Song-Thaek, acusado de corrupción y de intentar quitarle el poder. Una decisión que consolidó su autoridad y que eliminó a una de las figuras más cercanas a China dentro del régimen.

En 2017, Kim Jong-Nam, medio hermano del gobernante norcoreano y que vivía en Macao, fue asesinado en el aeropuerto internacional de Kuala Lumpur con el agente neurotóxico VX. Hasta ahora no se ha demostrado que Pyongyang haya estado tras este crimen, aunque el gobierno de Corea del Norte exigió a Malasia la entrega del cuerpo sin realizar ninguna autopsia.

Por otra parte, durante estos 10 años, Norcorea realizó cuatro de los seis ensayos nucleares de su historia. Y se especula que podría tener entre 40 y 50 ojivas nucleares. Además, aumentó significativamente el número de pruebas de misiles balísticos, en comparación con los años de su padre, Kim Jong-Il, y de su abuelo, Kim Il-Sung. Y que han incluido el primer lanzamiento de un proyectil desde un submarino, la prueba de un misil crucero y de otro supuestamente hipersónico. Mención aparte merece la compleja relación que hubo entre Kim y Donald Trump, principalmente en 2017, cuando Trump, además de amenazar con la “destrucción total” de Norcorea, calificó a Kim como “hombre cohete”, mientras que el líder norcoreano lo llamó “viejo lunático”.

A pesar de eso, ambos concretaron reuniones cara a cara en Singapur, Hanoi y la Zona Desmilitarizada que divide ambas Coreas. Pero que más allá de ser eventos mediáticos, no se tradujeron en compromisos o avances en la desnuclearización de Corea del Norte.

La llegada de Joe Biden a la Casa Blanca no ha logrado avanzar en las negociaciones entre Washington y Pyongyang, lo que mantiene congeladas las negociaciones. Mientras tanto, Kim Jong-Un sigue jugando “la carta nuclear” ante el resto del mundo.

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Alberto Rojas es el director del Observatorio de Asuntos Internacionales de la Universidad Finis Terrae.