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¿Cuáles son los productos y servicios que más han subido en un año?

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POR Andres Sepúlveda |

De los 303 bienes que mide el INE, el 88% muestra aumentos en sus precios en 12 meses. De ellos, los paquetes turísticos, el aceite, los pasajes aéreos, el diésel, la harina y las zanahorias son los que lideran la lista.

Durante los últimos meses se ha visto un alza generalizada de precios. A septiembre de 2022, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) -que es el mecanismo que utiliza el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) para medir la variación del precio de los productos y servicios de la economía chilena-, ha subido 13,7% en 12 meses.

En este escenario, las familias chilenas han debido ajustar su presupuesto, ya que casi no hay sectores que no se hayan visto afectados: desde combustibles hasta viajes, pasando obviamente por los alimentos, que son de compra recurrente. De hecho, de los 303 productos y servicios que incluye el INE en su canasta para calcular mensualmente el IPC, 266 muestran algún tipo de aumento. Y de este subgrupo, 159 lo han hecho a una tasa de dos dígitos. Incluso, hay 48 que han subido más de 25% en 12 meses.

Pero, en una economía en la que casi todo ha subido: ¿cuáles son los productos o servicios que más se han encarecido en el último año? Nuestro Contestadog, de Watchdog Pauta, salió a investigar para responder esa pregunta.

Según los datos del INE, los paquetes turísticos son los que más se han elevado, subiendo 75,1% en un año. Sin embargo, desde la misma entidad estatal explican parte del porqué este ítem ha subido tanto. “Su variación a 12 meses corresponde a un caso especial derivado de los ajustes metodológicos que se incorporaron tras la irrupción de la pandemia. Esta es explicada por su baja base de comparación sobre la cual se calcula”, explica el INE. Y agrega: “Es importante destacar que, en septiembre de 2021, este producto reingresó al cálculo del IPC, ya que por decisión metodológica, el producto se mantuvo imputado por arrastre para el periodo mayo 2019 y agosto 2021. La decisión de mantener el producto sin variación durante este periodo fue motivada por las restricciones de movilidad que existían en el país debido a la crisis sanitaria y la no disponibilidad de estos servicios”.

Desde el punto de vista financiero, el jefe de Estudios Trading de Capitaria, Ricardo Bustamente, menciona que el aumento de los paquetes turísticos se debe también al aumento del tipo de cambio. “Esta última apreciación del dólar que hemos tenido en nuestro país se va apoyando precisamente en que se genere mayor impacto en todo lo que tenga que ver con paquetes turísticos, especialmente al exterior, considerando que tienen un efecto cambiario importante”, asegura.

El gerente de Estudios de Inversiones de EuroAmerica, Felipe Alarcón, coincide. “Hay un efecto alcista inducido por la significativa alza del tipo de cambio, esto afecta al paquete turístico porque tiene un componente internacional que opera en dólares”, asevera. 

En la misma lista del INE, el segundo producto que más ha aumentado su precio en el último año es el aceite vegetal (68,8%), seguido por los servicios de transporte aéreo (67,7%), el petróleo diésel (59,1%), la harina (53,8%), la zanahoria (51,6%), el azúcar (48,6%), la carne de pollo (47,8%) y la gasolina (41,1%).

En cuanto a las razones, el director del área de consultoría de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, Pablo Barberis, comenta que el aumento generalizado de productos y servicios se debe en parte al retraso en el abastecimiento del mercado internacional a raíz del Covid-19, y también por el aumento de los costos de producción al tener mayores costos de energía. “Todo lo que se importa a Chile estamos comprándolo más caro, por lo tanto el costo es más grande, y eso se transforma en precio al público. Se vende más caro y los consumidores pagan más”, enfatiza.

Además, Bustamante indica que es importante considerar los efectos que ha tenido la guerra entre Rusia y Ucrania. “Los ataques de Rusia apoyaron distintas sanciones y también generaron recortes de suministros a nivel generalizado en diversos alimentos. Esta situación ha apoyado que veamos precios mucho más elevados en el último tiempo en comparación al año pasado”, agrega. A esto, Alarcón añade que los precios internacionales se dispararon luego del inicio del conflicto, dado que Ucrania es un productor agrícola importante de oleaginosas.

Pero así como el 88% de los productos o servicios han subido de precio, hay un grupo minoritario de 32 que no lo ha hecho (hay 5 productos restantes que no han variado). De entre ellos, los que se han abaratado más en 12 meses son los equipos de telefonía móvil (-20,7%), las bicicletas (-20,7%), las poleras infantiles (-18,8), la ropa deportiva y de baño para mujer (-14,9%), los zapatos para mujer (-14,2%) y los computadores (-12,8).

Proyecciones futuras

Bustamante afirma que si bien es probable que veamos nuevos incrementos en los precios en las próximas semanas -el IPC de octubre se publica el martes 8 de noviembre-, hay que considerar el factor cambiario. “Si vemos que se alcanza un techo del dólar en el corto plazo, podría apoyar sin lugar a duda que los productos que vienen desde el exterior tengan una baja de precio y, eso apoye a que a nivel generalizado veamos disminuciones. De todas maneras, las presiones siguen siendo más alcistas, por lo menos pensando en los próximos meses”, agrega.

Barberis menciona que recién en el próximo año se verá un impacto más notorio en la disminución que tendrá la inflación, debido a las medidas tomadas por el Banco Central. “Los precios se debieran estancar de alguna manera, difícilmente van a bajar en forma significativa, pero por lo menos no van a seguir subiendo, o si lo siguen haciendo será más paulatino ese aumento”, añade.

Alarcón comenta que, en cuanto a los alimentos, se debe considerar que estos son transables, por lo que se ven muy influidos por el tipo de cambio y el mayor costo de insumos para su producción. “La FAO ya ha publicado en su reporte de precios de alimentos una reversión importante de las alzas, la que debiese transmitirse a precios locales a medida que pasa el tiempo. El problema es que si el tipo de cambio sigue subiendo, dicha transmisión de precios se dificulta en el corto plazo, por lo que es clave que el peso chileno inicie una recuperación sostenida de su valor para aliviar de manera más efectiva las presiones inflacionarias desde el frente de los bienes transables”, asevera.