¿Cuál es el rol de la Comisión Experta antes y después de la votación del 7 de mayo?

Los 24 integrantes tienen plazo hasta el 6 de junio para entregar su propuesta marco y después deben garantizar la coherencia y armonía del texto final propuesto por el Consejo Constitucional, pudiendo integrar una comisión mixta con los consejeros antes del plebiscito del 17 de diciembre.

Han pasado casi dos meses desde la instalación de la Comisión Experta, instancia encargada de elaborar el anteproyecto constitucional en un plazo máximo de tres meses. Y nuestro Constitucheck semanal, de Watchdog Pauta, decidió profundizar en el rol que le corresponde hasta el cierre del proceso, fijado para fines de 2023.

La Comisión Experta está compuesta por 24 miembros y dividida en cuatro subcomisiones. Desde su puesta en operación ha trabajado intensamente en temas como sistema político, pueblos originarios, sistema electoral, protección ambiental, libertades religiosas, libertad de educación y sostenibilidad y desarrollo, entre otros temas.

El próximo domingo 7 de mayo se eligen los 50 integrantes del Consejo Constitucional. Esta entidad tomará como insumo el trabajo de la Comisión Experta y presentará una propuesta de nueva Constitución, la que será votada posteriormente por los chilenos.

El calendario de este proceso es el siguiente: después de la elección del Consejo Constitucional, el trabajo de la Comisión Experta concluirá el 6 de junio de 2023 y el Consejo Constitucional comenzará su labor el 7 de junio de 2023. Posteriormente, el 7 de noviembre de 2023, el Consejo Constitucional entregará la propuesta de nueva Constitución, que se someterá a un plebiscito ciudadano el 17 de diciembre de 2023.

En la semana previa a la elección de este 7 de mayo, la Comisión Experta y sus subcomisiones han decidido no realizar votaciones, pero sí continuar con las discusiones.

Francisco Medina, abogado y miembro de Polis, el Observatorio Constitucional de la Universidad de los Andes, explicó que actualmente se está tratando de llegar a acuerdos en diversas materias y que el proceso más complejo y tenso se vivirá después de las elecciones. “Va a depender mucho de cuáles son las fuerzas políticas que se logren imponer en el Consejo. Eso va a marcar el rumbo de las votaciones, sin duda, y de las discusiones, que en este momento se encuentran en una tregua”, señaló Medina.

Una vez retomadas las votaciones, la Comisión Experta deberá abordar las más de 900 enmiendas y temas pendientes. Además, sus integrantes serán los encargados de acompañar y supervisar el proceso de elaboración de la nueva Constitución. Según el plazo establecido, su trabajo debe concluir en los próximos días, y las votaciones sobre las propuestas presentadas comenzarán alrededor del 12 de mayo. Actualmente, solo se cuenta con un borrador y algunas indicaciones; no se tendrá un texto definitivo hasta que se elabore la propuesta o anteproyecto definitivo en el mes final.

Los 24 comisionados tendrán derecho a voz y deberán garantizar la coherencia y armonía del texto final. En caso de desacuerdo, también tienen la responsabilidad de participar en la Comisión Mixta y elaborar nuevas propuestas que puedan ser sancionadas por el Consejo Constitucional. Sin embargo, es importante destacar que el Consejo Constitucional es el principal actor en el proceso de elaboración de la nueva Constitución, ya que tiene derecho a voto a partir del 6 y 7 de junio. En este sentido, el paradigma técnico cambiará a uno esencialmente político deliberativo.

Finalmente, el 17 de diciembre de 2023 se llevará a cabo el Plebiscito de Salida, en el cual se consultará a la ciudadanía si aprueba o rechaza la nueva Constitución. Este plebiscito será un paso crucial para la implementación de la nueva Carta Fundamental y para la consolidación de un nuevo proceso democrático en el país.

El abogado y miembro del Comité Técnico de Admisibilidad, Tomás Jordán, dice que se ha cumplido con los plazos formales del borrador inicial y la presentación de las correspondientes indicaciones. Sin embargo, el también académico de la Universidad Alberto Hurtado resalta la complejidad de este proceso, ya que requiere de acuerdos y redacción de normas que sean coherentes y armonicen con el texto.